Red Eléctrica insiste en el proyecto de la línea de alta tensión, pese al rechazo social y político

El proyecto de Red Eléctrica de España (REE) de crear una línea de alta tensión desde Peñalba por Monzón hasta Isona (Lérida) sigue su tramitación. Ni las objeciones de 18 municipios y asociaciones ciudadanas ni el rechazo unánime de todos los partidos políticos en las Cortes de Aragón han conseguido frenar el proyecto que cuenta con el respaldo del Gobierno central. La compañía asegura que en estos momentos estudia las consideraciones recibidas desde las dos provincias afectadas de Huesca y Lérida para decidir el trazado definitivo de los 16 planteados en el documentación inicial que ha recibido tanta contestación en el territorio.

A la oposición social se sumó el rechazo de las Cortes, que renovó el consenso que ha existido históricamente en Aragón frente a las autopistas eléctricas. El pleno de la Cámara aragonesa aprobó en febrero por unanimidad una moción de CHA enmendada por el PAR que manifestaba su desacuerdo con el nuevo proyecto, "por sus posibles afecciones medioambientales y sanitarias, y ante la falta de respaldo social".

Pese a ello, el objetivo de que esté en servicio en 2013 se mantiene. Según fuentes de Red Eléctrica de España, el análisis se está afectuando ahora para definir el trazado y elaborar el informe de impacto ambiental, será entonces cuando se someta a información pública y se inicie el periodo de alegaciones. Sea cual sea la elección, la línea de 400 kW diseñada por REE sigue parte del trazado de las antiguas líneas proyectadas en la zona: la Aragón-Cazaril y la Graus-Sallente, ambas ya descartadas. De hecho, se reutilizaría la infraestructura que se llegó a montar en aquel momento, una serie de pilonas que nunca se llegaron a retirar. Las sospechas que siempre han existido en la zona de que este olvido significara que la línea que la Aragón-Cazaril no estuviera totalmente descartada, se están cumpliendo.

El Ministerio de Medio Ambiente fue el que remitió el informe del diseño de la línea a los municipios afectados, que recibieron con sorpresa el cedé que contenía la información en noviembre de 2008. Después de presentar sus consideraciones, el Ministerio las remitió a Red Eléctrica para su estudio el 29 de mayo de este año. Sin embargo, de estos trámites no se informa a los afectados que desconocen el estado de tramitación en que se encuentra.

Hasta ahora, este ha sido el papel de Medio Ambiente. Según el Ministerio, en estos momentos tienen que esperar a recibir del promotor la redacción del estudio de impacto ambiental.

Para esta fase, el proceso de información al público y el periodo de consultas a las administraciones afectadas que ya fueron avisadas en noviembre y a las personas interesadas hay un plazo límite de dos años. Todos estos trámites competen a la Dirección General de Política Energética y Minas del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, que remitirá de nuevo el expediente completo a la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del (MARM) para la formulación de la Declaración de Impacto Ambiental, que deberá hacerse en un plazo de tres meses.

De momento se han agotado cuatro de esos 24 meses así que todavía pasarán algunos más hasta que se conozca el trazado definitivo, según informan desde Red Eléctrica de España. Entonces, tendrán que someter el estudio a información pública y será cuando el Estado avisará de nuevo a los ayuntamientos y afectados que en la fase de consultas previas presentaron sus objeciones.

Red Eléctrica justifica su necesidad para abastecer a la línea de alta velocidad y evacuar la energía que se produce en los parque eólicos. La promotora resalta que será sensible con las objeciones.