HUESCA

Un atracador roba pistola en mano una oficina inmobiliaria de Biescas y deja al dueño atado

El ladrón actuó con frialdad, concluyó en pocos minutos y huyó a pie con un botín de entre 2.000 y 5.000 euros.

La oficina inmobiliaria de Biescas que el pasado fin de semana sufrió el atraco
Un atracador roba pistola en mano una oficina inmobiliaria de Biescas y deja al dueño atado
LAURA ZAMBORAÍN

La lista de robos con violencia en la provincia de Huesca no deja de crecer. El último caso que ha trascendido ocurrió el pasado fin de semana en Biescas, donde atracaron pistola en mano una agencia inmobiliaria de la que se llevaron más de 2.000 euros.


Según informaron ayer fuentes de la Guardia Civil, el suceso se produjo sobre las 20.45 del pasado sábado en la oficina de la red inmobiliaria del Banco Santander de la citada localidad. El atestado policial recoge que una persona entró en el establecimiento esgrimiendo una pistola e intimidó al dueño del negocio, única persona que se encontraba en su interior -en ese momento no había ningún cliente-.


Tal y como relató el propietario, César Valero, "fue todo muy rápido, en cuestión de 3 o 4 minutos". "Un hombre de mediana edad, buen aspecto, delgado, moreno, pelo corto y con la cara descubierta entró en el establecimiento y se dirigió a mí con mucha educación y sin mostrar signos de nerviosismo en ningún momento", subrayó. "Me pidió el dinero apuntándome con una pistola -añadió- y me inmovilizó, atándome a una estantería con una brida de plástico, en un almacén que tenemos en la parte de atrás".


El delincuente huyó del lugar a pie con un botín que, según la Guardia Civil, oscilaría entre los 2.000 y 5.000 euros. César Valero permaneció maniatado una media hora, "hasta que me pude soltar a base de fuerza". Una vez liberado de sus ataduras, llamó a la Guardia Civil, y varios agentes se desplazaron hasta el lugar de los hechos junto a la Policía Judicial, y a un médico, pero finalmente no precisó de atención sanitaria, aunque reconoce que "el susto fue gordo".


Real o simulada

Los agentes recopilaron todo tipo de pruebas en el local y el propietario pasó toda la mañana de ayer en el cuartel de la Guardia Civil de la localidad, aportando datos sobre el asaltante y lo ocurrido. Por el momento se sigue investigando, ya que se desconoce la identidad del atracador y si el arma que utilizó era real o simulada.


Esta sucursal se encuentra en la calle de Esperanza, una vía muy céntrica de la localidad pelaire, al lado de la casa consistorial, y a pesar de que en el momento del atraco había bastante gente paseando por los alrededores, nadie se percató de lo que ocurría en el interior del local. César Valero explicó que "normalmente se cierra a las 20.00, pero el sábado entró gente a última hora y se me hizo más tarde".


El alcalde de Biescas, Luis Estaún, quien también acudió el sábado al lugar del suceso, apuntó que por el momento se trata de un hecho aislado, "ya que no se tiene conocimiento de otros atracos ni incidentes en la zona, pero aun con todo hay que estar alerta", advirtió.


Por su parte, Jesús Arasanz, presidente de la Asociación de Empresarios Pirineos Alto Gállego (AEPAG), calificó la situación de "preocupante" y mostró su "inquietud", ya que, dijo, "aunque se trata de un caso aislado, es muy grave". "La gente que tenemos negocios no nos podemos fiar, porque ahora cualquiera te puede robar". En este sentido, Arasanz instó a las administraciones públicas y a la policía a "intensificar la vigilancia callejera, porque este tipo de situaciones, en los tiempos de crisis en los que nos encontramos, pueden ir a más". No obstante, también reconoció que "nunca podremos estar seguros del todo".