El conflicto por el voto ponderado caldea el Ayuntamiento de Huesca

El PP exige que el debate de las ordenanzas se retire del pleno y, como Cambiar, recurre los acuerdos de las comisiones municipales que no han aplicado el sistema de conteo aprobado en sesión plenaria en junio de 2015.

En primer término, dos concejales del PP en la comisión de Desarrollo. Junto a ellos, una edil de Cambiar y un concejal de Ciudadanos.
En primer término, dos concejales del PP en la comisión de Desarrollo. Junto a ellos, una edil de Cambiar y un concejal de Ciudadanos.
Pablo Segura

El Ayuntamiento de Huesca ha entrado en una peligrosa pendiente a siete meses de las elecciones que podría suponer el colapso de la gestión en la recta final del mandato. Para este miércoles, 17 de octubre, está convocado un pleno al que, entre otros puntos, se lleva la modificación de las ordenanzas fiscales para 2019. El grupo del PP ha pedido que se retire del orden del día por el sistema de votación que se aplica en las comisiones desde que PSOE y Aragón Sí Puede están en minoría numérica, tras la expulsión del tripartito de Cambiar a principios de septiembre.

Hasta entonces, el voto era ponderado, es decir, proporcional al número de concejales de cada grupo en la corporación. Ahora es en función de los representantes que cada grupo tiene en la comisión: PSOE, dos; PP, dos y Cambiar, Ciudadanos y Aragón Sí Puede uno cada uno. Antes, el cómputo se hacía en función de los ediles de la corporación: ocho por el PSOE, nueve por el PP, cuatro por Cambiar, dos por Ciudadanos y dos por Aragón Sí Puede. Parece lo mismo, pero el resultado no es igual, al menos no desde que la plataforma de izquierdas está fuera del gobierno municipal.

Cambiar ya ha denunciado la modificación del contaje y ha recurrido los resultados de las comisiones en las cuales la nueva fórmula, con los votos del bipartito (que suman 3) y de Ciudadanos (1), ha permitido en nombramiento de un nuevo presidente de área, rechazado por PP (2) y Cambiar (1).

El equipo de gobierno justifica el nuevo sistema en el informe del secretario del Ayuntamiento en respuesta a una petición del PP. El documento argumenta que la composición de las comisiones es "proporcional" a la representación política en el pleno y que no es aplicable en ninguna de ellas el voto ponderado. Cambiar no está de acuerdo con estas conclusiones porque no se pronuncia sobre la validez del acuerdo del pleno de julio de 2015 en este sentido. 

Desde que salieron del equipo, los cuatro ediles tenían claro que iban a frenar los cambios al frente de los ámbito municipales que ellos gestionaban: Medio Ambiente, Servicios Sociales y Desarrollo. Es una forma de obligar al alcalde a asumir esas responsabilidades,  algo que contribuirá sin duda a ralentizar la gestión de las mismas por cuestiones de agenda.

Cambiar ha recurrido los acuerdos de esas tres comisiones y ha anunciado que si antes del pleno de este miércoles, a las 17.30, no reciben una contestación favorable a la petición de anulación solicitada, su abstención en la comisión de Hacienda sobre las ordenanzas se tornará en rechazo en esta sesión plenaria. Esto supondrá que la propuesta aprobada en comisión por el voto de calidad del presidente no salga adelante y que haya que prorrogar las tasas e impuestos del año pasado, que, por otra parte, son las mismas, salvo el 2% de incremento en el recibo del IBI previsto para el año que viene. Con los presupuestos podría ocurrir lo mismo.

Un terreno 'pantanoso'

Ahora, el grupo del PP ha ido más allá. Además de recurrir los acuerdos de los nombramientos, se opone al dictamen de la comisión de Hacienda y, como medida cautelar, pide que el asunto se retire del orden del día. Los populares fundamentan sus recursos en el acuerdo de pleno de julio de 2015, donde se estableció el voto ponderado en las comisiones informativas, y que fue validado en sentencia judicial, tras la demanda presentada por ellos mismos.

El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Huesca, Gerardo Oliván, señala últimas decisiones adoptadas por Luis Felipe "se dictaron en contra de la normativa que adoptó el propio Ayuntamiento y, en consecuencia, son nulas de pleno derecho". Los populares anuncian que no van a ceder milímetro en su defensa de la legalidad, y advierten al alcalde que "se está internando en un terreno pantanoso que hace peligrar los últimos meses del mandato".

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