Detenidos dos hombres por el incendio de un vehículo robado en Francia en un campo de Huesca
Un testigo avisó a la Policía de que un coche estaba ardiendo en la calle Alcañiz y de que dos personas habían salido huyendo del lugar. Fueron localizadas en la Estación Intermodal.
La Policía detuvo el pasado día 7 en Huesca a dos hombres de nacionalidad inglesa como supuestos autores del incendio de un vehículo. El turismo, un Peugeot, modelo 205, con matrícula francesa quedó calcinado en un campo junto a una nave en la calle Alcañiz y que había sido denunciado como robado en Francia. Fue un vecino el que alertó por teléfono a las 7.55 de ese día 7, de que el coche era pasto del fuego y de que había visto a dos personas huir corriendo. El comunicante incluso detalló la vestimenta que llevaban.
Una patrulla de la Policía Local se desplazó a la zona indicada y los agentes comprobaron que el vehículo se encontraba completamente en llamas por lo que se dio aviso a los bomberos, que sofocaron el fuego. Con la descripción facilitada por un testigo comenzaron a buscar por diferentes zonas de la ciudad de Huesca y, finalmente, pudieron localizar en la Estación Intermodal a dos individuos que podrían ser las personas buscadas. Estos fueron detenidos y trasladados a dependencias policiales, donde quedaron detenidos y tras pasar a disposición judicial fueron puestos en libertad, según informaron desde la Policía Nacional. El vehículo quedó también en el Depósito Municipal de Vehículos a disposición judicial.
Lo ocurrido en Huesca recuerda al caso de Binaced, que investiga la Guardia Civil, aunque ambos hechos no tienen relación, confirmaron fuentes policiales. El pasado 19 de septiembre se encontró el cuerpo de un hombre, totalmente calcinado, en el interior de un vehículo, también destruido por el fuego. El coche, un todoterreno, estaba perfectamente aparcado y medio escondido entre los árboles frutales de una finca del municipio. Al parecer, había hecho el viaje desde Francia y le faltaba la placa de la matrícula, pero el turismo pudo identificarse por el número de bastidor. La autopsia no reveló datos concretos que arrojaran luz sobre lo sucedido. Los indicios apuntan a que se trataba de un hombre de 46 años residente en una ciudad del sur de Francia, pero queda por determinar si su muerte fue un crimen o un suicido.
