Un informe aconseja talar 15 árboles de gran porte en el paseo Ramón y Cajal de Huesca

Seis cedros, seis cipreses y tres olmos. Un informe de la consultora especializada Pirinea a la que el Ayuntamiento de Huesca encargó un análisis de los árboles del paseo Ramón y Cajal ha propuesto talar por motivos de seguridad un total de 15 ejemplares de gran porte además de siete pies de aligustre. El Consejo Sectorial de Medio Ambiente, en el que están representados los grupos políticos municipales, organizaciones profesionales y colectivos ciudadanos, conoció este martes los detalles de este estudio, llevado a cabo por la empresa Pirinea.

La concejal de Medio Ambiente, Carmen García, explicó que el informe recoge diversas causas para proponer la tala de seis de los 21 cedros que jalonan el paseo, que está pendiente de reurbanización. Unos presentan una inclinación preocupante mientras que otros han levantado la tierra con sus raíces. Es el segundo estudio que se realiza sobre estos árboles. El Ayuntamiento encargó el primero en 2016 tras la caída, por dos veces, de una rama del cedro situado al principio del paseo, cerca de la plaza de Santo Domingo. El árbol medía 22 metros de altura y había riesgo de desplome, por lo que se taló en julio del año pasado. Este primer análisis también concluyó que era necesario talar seis de los cedros, aunque uno de ellos no coincide con el nuevo informe.

Los árboles que deben talarse están en diferentes puntos del paseo. “No pueden trasplantarse porque su capacidad de supervivencia no es factible, según nos ha dicho el experto” explicó la concejala. Sí se llevará a otro lado el olivo que está en la esquina del paseo con la calle Arnal Cavero y que también va a eliminarse de su emplazamiento actual.

García explicó que los árboles del paseo Ramón y Cajal han sufrido varias urbanizaciones y obras en su entorno que han afectado a la superficie radicular y que algunos no han aguantado bien. “No se nota hasta que pasan años”, apuntó. Según dijo este informe se entregará al área de Urbanismo para que se tenga en cuenta a la hora de acometer las obras de urbanización. “Habrá que hacer un seguimiento y marcar un radio de protección de las raíces porque cualquier movimiento de tierra puede afectar a estos cedros”, añadió. Los que no se talen se podarán para aligerar el peso.

El informe que ayer se conoció en el Consejo Sectorial se expondrá en una asamblea de vecinos del barrio de Santo Domingo y San Martín, donde está el paseo. El área de Medio Ambiente incluso propone organizar visitas para explicar la situación de los árboles.

Bomberos

Por otra parte, el viento registrado en Huesca en los dos últimso días obligó a los bomberos a cortar este martes dos ramas a punto de desprenderse en sendos árboles de la calle Algascar y el paseo Lucas Mallada, detrás de la Universidad. Además, se recogió un árbol pequeño caído en una acera del barrio de los Olivos.