Cuatro heridos al caer de sus caballos en una estampida

Realizaban un paseo por un bosque de Sallent cuando los animales se espantaron. Uno es un niño de 12 años.

El paseo a caballo de un grupo de excursionistas por el bosque del Betato, en el municipio de Sallent de Gállego, estuvo a punto de acabar trágicamente cuando los animales se espantaron y se produjo una estampida, tirando a varios de los jinetes al suelo. El accidente ocurrió el lunes a las 12.00 y se saldó con cuatro heridos: una pareja de 43 y 44 años y su hijo, de 12, vecinos de Barcelona, así como una mujer de 40 procedente de Madrid.

Según informó la Guardia Civil, al tratarse de una zona boscosa se pidió auxilio al grupo de rescate en montaña de Panticosa y el apoyo del helicóptero. Las dos mujeres fueron evacuadas por vía aérea al hospital San Jorge de Huesca. Una estaba inconsciente y se la transfirió al helicóptero del 112. Al varón lo trasladaron al hospital de Jaca y al menor, en ambulancia, también a Huesca. Los heridos sufren fracturas y golpes. Con ellos iban otros jinetes que salieron ilesos.

Casualmente, en el mismo bosque y el mismo día, la Guardia Civil tuvo que auxiliar a una mujer de Zaragoza, de 39 años, que se cayó y sufrió un corte en una pierna.  

Los grupos de rescate realizaron además otras tres intervenciones el lunes, dos de ellas para socorrer a montañeros enriscados. La primera en el valle de Pineta (Bielsa). Cuatro excursionistas, dos hombres y dos mujeres de nacionalidad francesa, de entre 27 y 30 años, que regresaban desde el refugio de Góriz, se perdieron sin poder avanzar. Facilitaron sus coordenadas y fueron localizados y trasladados en helicóptero a la pradera de Ordesa.

Algo parecido les ocurrió a dos alemanes, de 54 y 64 años, que se extraviaron cuando bajaban desde las pistas a Cerler (Benasque). A pesar de ver el pueblo, no podían seguir descendiendo porque había un cortado y ya no tenían fuerzas para desandar el camino. Era de noche, y cuando los guardias los encontraron, al verlos tan agotados, decidieron quedarse con ellos hasta la llegada del helicóptero por la mañana.

Por último, ayer, la unidad aérea trasladó a El Pueyo de Jaca a un montañero madrileño de 21 años que se lesionó el tobillo cerca del refugio de Respomuso.

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