Sentimientos y emociones que brillan en la oscuridad

Un taller con luz negra en Huesca acerca a los niños la historia de 'El Monstruo de colores'.

Colores y emociones brillaron en la oscuridad en el taller.
Colores y emociones brillaron en la oscuridad en el taller.
R. Calvo

Cartulinas fosforitas y luz negra fueron los elementos protagonistas del taller que este viernes se llevó a cabo en la Ludoteca Municipal Candeleta de Huesca. Con la única iluminación de varios de estos fluorescentes, fue apareciendo en la oscuridad del aula un monstruo con ciertos problemas emocionales, que los pequeños participantes en la actividad le ayudaron a resolver. La alegría era amarilla fosforita, la rabia naranja y muy oscuro el miedo, así los diferentes sentimientos fueron brillando sobre un fondo negro para ocupar su sitio dentro del monstruo.


“Nos hemos basado en el libro 'El monstruo de colores' de la autora Anna Llenas, que está muy de moda, ya que tiene una enseñanza muy positiva para los pequeños en lo que respecta a las emociones y se cuenta de una manera muy sencilla y divertida”, explicaba María Martín junto a José Miguel Sánchez, de la asociación cultural El Globo, que se encargaba de llevar a cabo el taller, dentro de la programación de las ludotecas municipales. Ambos destacaban que al realizarse con estos materiales tan llamativos, la influencia en los pequeños era mayor, mucho más impactante.


Ese es el principal objetivo de las diferentes actividades de este tipo que se suceden cada dos semanas en la Ludoteca Candelera, el de sorprender y descubrir un nuevo mundo sensorial a los niños. Además de con la luz negra y los elementos que brillan en la oscuridad, protagonistas este viernes, también llevan a cabo otro taller con sombras y luz, programado para el próximo viernes 2 de diciembre. “Se trata de una oportunidad de que los niños desarrollen su imaginación y creatividad”, valoran desde la organización.


La pequeña Valentina se mostraba encantada al término del taller 'A oscuras con la luz negra', fascinada todavía por la historia del monstruo, en cuyo relato se involucró también a los padres de los pequeños. Los de Valentina destacaban la originalidad de la actividad, que habían conocido a través de un folleto que recibieron en el colegio y de las redes sociales. Tras escuchar la historia, los pequeños pudieron seguir jugando con los materiales, disfrazándose con caretas y prendas blancas y fosforitas que les hacían brillar en la oscuridad, o elaborando un 'Mr. Potato' fluorescente.Jornadas de convivencia


No será esta la única actividad que llevarán a cabo las Ludotecas Municipales de Huesca este fin de semana. Este sábado desde las 11.30 y hasta las 13.30, la zona exterior del centro cultural Manuel Benito Moliner, donde se ubica la ludoteca Cascabillo, se llenará de niños en la celebración de las terceras jornadas de convivencia en torno al juego y al juguete de ayer.


Así, se formarán grupos para llevar a cabo juegos cooperativos, como el balón prisionero, la rayuela o la gallinita ciega, también se dispondrá de juguetes tradicionales, como diábolos, yo-yos, chapas o combas. Además, hay programado un taller creativo de juguetes de antes, en el que se elaborarán peonzas con goma eva, recortables, calcomonias o juegos de hilo.


Todo se completarán con la exposición 'Juegos de ayer', que reflexiona sobre los juegos de hace unos años, comparándolos con los actuales.

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