El homenaje a la cuna de San Lorenzo pone a punto los ánimos a dos días del chupinazo
Las mairalesas hicieron la ofrenda de flores y frutos en una misa celebrada en la ermita a la que no asistió el alcalde.
La ermita de Loreto, cercana a Huesca, fue escenario de un entrañable acto que se celebra desde hace 20 años en los días previos el inicio de las fiestas de San Lorenzo, del 9 al 15 de agosto y declaradas de Interés Turístico Nacional. Se trata de un homenaje a la cuna del patrón de la capital oscense en el santuario que se levanta sobre el lugar donde se dice que nació y vivió junto a su familia. Decenas de personas, algunas ataviadas ya de blanco y con la pañoleta verde laurentina, acudieron a la misa, la ofrenda y el posterior reparto del pan de frutas que se toma como postre típico estos días y que lleva el nombre del santo.
Desde mucho antes de las 12.00, los vecinos empezaron a congregarse en el entorno de la ermita. Buscaban la sombra debido al fuerte calor que a esas horas caía sobre el campo. Las mairalesas, jóvenes y niñas que representan a los barrios y peñas de Huesca, llegaron en un autobús fletado por el Ayuntamiento. Portaban cestas con las ofrendas y se sentaron en lugar preferente.
La Real Cofradía de Loreto y San Lorenzo también había dispuesto varios bancos para las autoridades. Este año se echó en falta la presencia del alcalde, habitual en este este homenaje. Los tres concejales del equipo de gobierno que asistieron al acto excusaron la ausencia del primer edil, también socialista, ante el prior de la hermandad. "Me han dicho que no podía venir porque tenía una entrevista", comentó Santiago Pardo, quien restó importancia al hecho.
La ausencia del alcalde coincide con la entrada en vigor del nuevo y polémico Reglamento de Protocolo y Ceremonial, que impide la asistencia de los concejales a los actos religiosos con los símbolos de la corporación, es decir, con la banda roja. Ayer, a Loreto acudieron tres de los ediles del equipo de gobierno (PSOE-Cambiar y Aragón Sí Puede) y ocho de los nueve del PP, además de la exalcaldesa y ahora diputada Ana Alós.
Ciudadanos no asistió y los populares realizaron una ofrenda.
Debido al nuevo protocolo, este año ha sido la Cofradía de Loreto, impulsora del homenaje, la encargada de cursar las invitaciones, algo que antes hacía el Ayuntamiento de Huesca.
Tras la misa, en la que participó la Coral de Santo Domingo, se ofreció a los asistentes el pan de San Lorenzo, aportado por pastelería Ascaso así como un botellín de agua o un vaso de vino. El almuerzo estuvo amenizado por el Grupo de Habaneras de la Asociación San Mateo de Monzón, una actuación organizada por la Peña Recreativa Os Casaus, cuya presencia siempre es notoria en este acto prelaurentis.
El prior de la cofradía señaló que este homenaje a la cuna de San Lorenzo "es una preparación corporal, espiritual y anímica para el inicio de las fiestas".
