De Luis Buñuel a la última de Almodóvar

Una enorme navaja de afeitar, colocada en el exterior del Centro Cultural del Matadero, es la carta de presentación de una de las muestras que presenta en su interior, ya que se trata de una reproducción de tres metros del premio que se entrega a los vencedores del galardón Pepe Escriche en el Festival de Cine de Huesca, y que traslada de inmediato a la escena del ojo cortado en 'El perro andaluz' de Luis Buñuel. El cineasta turolense es uno de los protagonistas de “La maquina del tiempo del cine aragonés', la exposición que hasta el próximo 24 de abril podrá verse en el espacio oscense y que se presenta como un paseo por participación aragonesa en el mundo del cine a lo largo de la historia.

Un recorrido desde que Eduardo Jimeno rodara junto a su padre en el año 1896 las fiestas del Pilar en la primera película creada en España, hasta los rodajes más recientes llevados a cabo en territorio aragonés, como la última de Almodóvar, 'Julieta', que se estrenará este viernes y que cuenta entre sus localizaciones con los pueblos de Fanlo y Broto. A través de una veintena de paneles informativos, reforzados con fotografías, programas, carteles, objetos promocionales u otros elementos curiosos, la exposición se centra en todos los aspectos relacionados con el séptimo arte en Aragón.

La puesta en marcha de las primeras salas, los realizadores y actores aragoneses, los Cineclubs, los festivales que se celebran en las tres provincia o la utilización de sus paisajes como escenarios son algunos de los temas que se tocan en la exposición, que llega a la capital oscense a modo de pequeño homenaje a José María Escriche, padre del Festival de Cine de Huesca. Para ello, se han ampliado los expositores y se ha aumentado el material para centrarlo en mayor medida en el cine altoaragonés, gracias a la coordinación de Ángel Garcés.

Entre lo más curioso, un enorme panel muestra la relación de títulos rodados en la provincia de Huesca, que argumenta que antes de 'La Novia' o 'Palmeras en la nieve', que han motivado la calificación como 'plató cinematográfico' del territorio altoaragonés, este ya había servido para dar localización a un varios centenares de producciones a lo largo de la historia, con 'Al Hollywood madrileño', que Nemesio Sobrevila rodó en la Sierra de Guara o el Salto de Roldán, como pionera en el año 1927.

La aportación oscense al séptimo arte tiene otro nombre propio que tiene su espacio en la exposición, el de Julio Luzán, que ha participado en la elaboración de los decorados de muchas producciones, y del que se exhiben algunas piezas junto a una televisión que muestra escenas de las películas en las que participó, como 'Lo imposible' o 'Astérix y Obélix en los Juegos Olímpicos'. Además, de su taller ha salido también la reproducción del premio José María Escriche que se encuentra en el exterior del edificio.

La muestra es itinerante, y su siguiente parada será La Almunia, donde, como en todos los lugares anteriores, se le intentará dar un mayor peso a la aportación cinematográfica de la zona.