Alcanzar la ciudad imperial de Marrakech es el objetivo de la Panda Raid, una carrera que el próximo domingo 5 de marzo arranca su octava edición y que contará con participación oscense. Juan Hernández, 42 años, partirá desde Huesca para embarcarse por segunda vez en esta aventura. Junto al palentino Pedro Bueno cruzarán Marruecos de norte a sur y de oeste a este, con la particularidad de que lo harán conduciendo un Fiat Panda.

“Ya estuvimos el año pasado, cuando fuimos tres coches desde Huesca, y fue una experiencia muy enriquecedora”, explica Hernández. Tanto le aportó que ha decidido repetir por segunda vez, aunque en esta ocasión solo él ha logrado cuadrar sus vacaciones para participar en este reto de 10 días.

Fue a través de internet como un grupo de oscenses aficionados al motor descubrieron el pasado año esta carrera, al más puro estilo de las primeras ediciones del París-Dakar, pero con un precio reducido y ciertos condicionantes, ya que no se pueden utilizar ni GPS ni dispositivos móviles, con la única referencia de una brújula y un mapa. “Al final sigues como un navegador, pero en papel, un mapa”, aclara.

Juan Hernández se ha dedicado la gran mayoría de su vida a la mecánica, por lo que no le fue complicado resolver las averías que se sucedieron durante el viaje de la anterior edición. “Yo tuve que reparar un amortiguador, y fuimos ayudando a los otros participantes que lo necesitaron, porque aunque es bastante duro, toma parte gente sin muchos conocimientos de coches, solo como una aventura”, dice, y asegura que es ese compañerismo una de las cosas que más le llenó del viaje.

Además de los increíbles paisajes que recorrió en los casi 5.000 kilómetros que sumó a su marcador. “Después de completar etapas de hasta 10 horas te toca dormir en una tienda de campaña, que tú mismo preparas”. Si algo recuerda Hernández fue el día en el que le tocó dormir a los pies del Atlas, “no había pasado tanto frío jamás”.

Pero todo lo compensó la experiencia a nivel humano, ya que la prueba tiene una vertiente solidaria. Todos los vehículos participantes deberán portar 20 kilos de material escolar, que entregarán en una escuela durante la tercera jornada del raid. “Te encuentras realidades muy variadas, gente que no tiene nada, y que te marca, sobre todo por los niños que ves, que lo pasan realmente mal, y que te enseña a valorar lo que tienes aquí”, asegura Hernández.

En su caso, aportará casi 100 kilos de productos infantiles, recogidos en campañas en diferentes colegios y gracias a las donaciones de sus amigos. “Para poder soportar ese peso extra he tenido que reforzar el coche”, dice este oscense, que se muestra especialmente orgulloso de su trabajo en su Fiat Panda, modelo 4x4, que adquirió en Jaca y en el que ha invertido mucho tiempo. “Era de los más preparados, tanto que algunas publicaciones de automóviles en Italia se han interesado por él y le han hecho reportajes”, explica.

La aventura comienza este viernes en Madrid, de donde pondrán rumbo a Algeciras para viajar hasta Marruecos. Hasta la capital le acompañarán con sus Pandas los otros oscenses que participaron el año anterior y en esta no han podido estar. “Iremos todos. Es toda una fiesta”, explica. Por delante tendrá diez días y muchos kilómetros que recorrer.