La DPH amplía la oferta de espacios accesibles con un mirador en la sierra de San Quílez, en Binéfar

La Diputación Provincial de Huesca (DPH) ha ampliado la oferta de espacios accesibles con un nuevo mirador en la sierra de San Quílez, en Binéfar, que proporciona una panorámica de las llanuras agrícolas que desde el Prepirineo bajan a unirse con el Ebro.

La actuación ha supuesto un coste de unos 25.000 euros, que ha aportado la institución provincial. Este espacio es el primero de estas características en el sur de la provincia y forma parte del Programa de Turismo Accesible. Este último apuesta por "ofrecer una serie de infraestructuras adaptadas para todo tipo de usuarios, especialmente orientadas a los colectivos con necesidades especiales", ha explicado la responsable de Desarrollo Territorial y Medio Natural de la DPH, Maribel de Pablo, que ha visitado el espacio tras la finalización de los trabajos.

El mirador está situado a tres kilómetros de la localidad de Binéfar, en el área recreativa a la que da acceso al camino natural de San Quílez. El alcalde de Binéfar, Alfonso Adán, ha dicho que esta actuación contribuye a repoblar en diferentes fases "esta sierra muy querida por las gentes" de la localidad, que ha subrayado la "implicación" con las personas que más lo necesitan en favor de la igualdad de oportunidades.

Ambos responsables políticos han disfrutado de este entorno natural un grupo del centro ocupacional Nazaret, así como con miembros de Down-Huesca, del Centro de Día del IASS, de Cruz Roja y Cáritas Binéfar, encabezados por Rosa Paños, Ventura Gibanel, David Lumbiarres e Isabel Tarragó, respectivamente.

Igualmente, han visitado la zona los tenientes de alcalde Daniel Isábal y Juan Carlos García, el jefe del área de Desarrollo de la DPH, Francisco Orduna, y el responsable de senderos y señalización turística de Prames, Félix Ajona.

De Pablo ha indicado que las asociaciones y colectivos del ámbito de la discapacidad han acogido favorablemente esta actuación. Según ha apuntado, cada mirador tiene su singularidad e idiosincrasia dependiendo de donde se ubica, en este caso con las vistas a las tierras agrícolas literanas, "que ahora están al alcance de todos", también para mujeres embarazadas, carritos de bebé, niños y mayores, así como para el público en general.

Señalización

El mirador está señalizado desde todos los accesos y se sitúa junto a un área recreativa existente en el entorno del Camino Natural de San Quílez. Antes esta zona no tenía equipación de ningún tipo, se limitaba a una pequeña explanada con vistas hacia Binéfar y la plana. El acceso desde Binéfar tiene un primer tramo de pista asfaltada y a partir del Canal de Zaidín el firme es de zahorras compactadas.

La actuación ha consistido en habilitar una pequeña explanada para convertirla en un mirador accesible. Para ello se ha dotado al espacio de un firme adecuado para garantizar la movilidad de los usuarios de sillas y de dos plazas de estacionamiento de vehículos, una de ellas adaptada. El responsable de senderos y señalización de Prames, Félix Ajona, empresa encargada de realizar las obras, ha explicado que es "una estructura naturalizada, no es hormigón, ni cemento, es tierra de Fonz, que tiene que ver con la zona y responde bien a la impermeabilización y rodadura".

También se ha dotado al lugar de dos bancos de descanso y una mesa de picnic, todo adaptado para personas con discapacidad. La mesa panorámica que se ha instalado cumple con los parámetros de altura para sillas de ruedas, cuenta con textos en el sistema de escritura habitual y en braille y con imágenes en altorrelieve, además de estar enclavada en sombra para la época estival.

Los contenidos de la mesa permiten hacer accesible el paisaje que se ve desde este lugar y desde los distintos niveles de horizonte, hasta llegar a observar lugares del Pirineo, como el Turbón, y también lo más cercano. Para garantizar la seguridad de los usuarios se ha instalado un barandado de protección que delimita todo el perímetro.

La primera fase del proyecto de Turismo Accesible de la Diputación consistió en la redacción de un manual, mientras que la segunda pasa a ser el acondicionamiento de varios senderos en la provincia de Huesca: el sendero El Cornato, en las inmediaciones de Bielsa, el de Santa Elena, en Biescas, y el del valle del Isábena, entre los municipios de Laspaúles y Bonansa, a lo que ahora hay que sumar otros miradores, similares al de Binéfar, en Aratorés, Castanesa y también en el valle de Hecho.