Los expertos llevan semanas alertando del peligro añadido que hay este verano en el Pirineo oscense por la gran cantidad de nieve que todavía persiste por encima de los 2.500 metros tras un invierno con precipitaciones récord y, lamentablemente, este pasado fin de semana se ha vuelto a confirmar este riesgo con el fallecimiento de un montañero cántabro en el pico Infiernos y con una mujer de 51 años, vecina de San Sebastián, que sufrió heridas graves en la Gran Facha, ambos en Panticosa y con la misma causa: un resbalón en la nieve.

Desde mediados de junio, este tipo de caídas se han cobrado ya dos vidas y heridas a otros 13 montañeros, la mayoría de ellos de gravedad. Por ello, los especialistas no se casan de insistir en recomendar mucha prudencia y precaución como la campaña Montaña Segura, que ayer mismo compartió una fotografía del día de Monte Perdido con el acceso completamente nevado y recordando que, por tanto, es «obligado» llevar piolet y crampones.

Precisamente el verano arrancó con un trágico accidente en este mítico pico del Pirineo ya que un montañero belga que perdió la vida el pasado 14 de junio en la peligrosa Escupidera después de caer al vació tras un resbalón en la nieve que resultó fatal. Iba junto con un grupo de siete persona y aunque iba equipado con piolet y crampones para atravesar con seguridad la ladera, no pudo evitar precipitarse 100 metros.

El segundo accidente mortal ocurrido en una pendiente nevada tuvo lugar el pasado  domingo cuando un montañero de Castro Urdiales, que también llevaba el equipo adecuado para avanzar por un terreno nevado, sufrió una caída mortal de 100 metros hacia el fondo de una canal en el pico de los Infiernos.

En este último mes se han contabilizado ya trece accidentes en pendientes nevadas. Algunos de ellos han sido especialmente graves como el de un zaragozano de 62 años que sufrió una caída en el Collado de Salenques cuando iba acompañado de un sobrino y tuvo que pasar la noche en un vivac junto a los especialistas de la Guardia Civil hasta que pudo ser rescatado con seguridad por el helicóptero con las primeras luces del día; el de una pareja de Pamplona de 61 y 62 años que también se cayeron en el glaciar del Aneto sufriendo heridas de gravedad, uno de ellos cuando trataba de ayudar al que se había caído primero; o el de tres montañeros (un hombre de 32 años, vecino de Tarrasa, una danesa de 26 y un sueco de 33) que se golpearon contra las rocas en la Brecha de Rolando al cruzar un nevero sin crampones ni piolet.

Aparte de los dos accidentes mortales por caídas en la nieve, desde que comenzó la temporada de verano se han registrado otros cinco fallecimientos más en actividades de naturaleza en la provincia de Huesca. Entre ellos hay dos barranquistas que murieron ahogados en el río Yaga (Tella-Sin) y en el Vero (Alquézar); un guardia civil de Jaca que perdió la vida haciendo salto base en Plan en su tiempo libre; un montañero zaragozano de 44 años que resbaló y sufrió una caída mortal en el valle de Otal (Torla); y un escalador catalán de 47 años que falleció en el valle de Pineta.

Accidentes en nieve este verano

14 de junio. Un montañero belga de 31 años muere en la Escupidera de Monte Perdido al caer 100 metros pese a ir con crampones y piolet.

23 de junio. Un montañero francés de 41 años se fractura la pierna al engancharse con el crampón y precipitarse 30 metros en Monte Perdido.

26 de junio. Una montañera francesa de 69 años cae 20 metros en el pico Rusell pese a llevar crampones y piolet y sufre una fractura de tibia y peroné y traumatismos en la cabeza y la mano y laceraciones en los brazos. Además, un montañero se queda bloqueado varias horas en un nevero hasta que es rescatado ileso.

30 de junio. Una zaragozana de 61 años se golpea en la cabeza al deslizarse 30 metros en el Collado de Pondiellos. Y otro zaragozano de 62 años se lesiona el tobillo en el Ibonet de Literola tras una caída.

1 de julio. Una pareja de Pamplona de 61 y 62 años sufren heridas graves al golpearse contra unas piedras en el glaciar del Aneto.

3 de julio. Tres jóvenes de 26, 32 y 33 años, respectivamente, se golpean contra las rocas en la Brecha de Rolando cuando intentaban cruzarlo sin crampones ni piolet.

11 de julio. Un montañero de Granada de 57 años sufre una lesión en la cabeza en la zona del Portillón Superior.

17 de julio. Un zaragozano de 63 años sufre heridas de gravedad tras una caída en el Collado de Salenques. Tuvo que pasar la noche en un vivac acompañado de los especialistas de la Guardia Civil.

19 de julio. Un montañero barcelonés de 65 años se precipita en el descenso del pico de los Infiernos y a consecuencia de ello presenta heridas de diversa consideración.

22 de julio. Un montañero cántabro de 63 años fallece al precipitarse 100 metros por una canal en el pico Infiernos pese a ir equipado con crampones y piolet.

22 de julio. Una mujer de 51 años, vecina de San Sebastián, sufre lesiones graves (policontusiones y posibles fracturas en vértebras, pelvis y pierna) al caer unos 30 metros desde la Gran Facha hasta el Ibón Superior, a 3.000 m.