De las semillas de las manzanas a la sidra, todo sin salir del Sobrarbe

La asociación 'Arto, un paso atrás' promueve el cultivo de variedades locales, tanto en frutas como hortalizas.

Algunas de las manzanas cultivadas por Arto, antes de convertirse en sidra.
Manzanas del Sobrarbe.
Rondadora

Cada año España importa cientos de toneladas de manzanas, procedentes en su mayoría de Italia, y cultivadas en los Alpes a elevadas altitudes. Unas manzanas que crecen con unas características similares a las que se dan en el Pirineo, que podría ser también en lugar propicio para producir esta fruta. Así lo apuntan desde la asociación 'Arto, un paso atrás', que llevan casi dos décadas dedicándose a recuperar las semillas de las variedades locales, así como todo el proceso ligado a su cultivo, como atender a las lunas o seguir determinada estacionalidad. Unas ochenta variedades de hortalizas, entre ellas más de 33 variedades de judías, algunas exclusivas de la comarca del Sobrarbe, crecen en sus fincas experimentales, en la que se sigue un proceso totalmente ecológico. “Apostamos así por una alimentación sana y de calidad. Cambiar también el método y hacerlo como se hacía antiguamente”, explica Juan Gracia, como coordinador de esta asociación sin ánimo de lucro, que nació en torno al año 2000 para recopilar semillas en riesgo de perderse.

Además, dentro de sus objetivos ya no está solo el de desarrollar estos cultivos, sino también el de otorgarle un recorrido y un fin, convirtiéndolas en una forma de vida y un motivo de asentamiento de la población. Por ello, decidieron unirse a modo de prueba con la firma de cerveza artesanal Rondadora y aprovechando los conocimientos en este campo de sus productores, para crear con esas manzanas autóctonas una sidra que presentaron en al última edición de la Ferieta de Aínsa. “El resultado fue muy positivo, ya que salió una sidra que no es comparable a la asturiana por sus características, pero es muy refrescante”, explica Gracia, que espera darle continuidad al proyecto, en base también a los 50 tipos diferentes de manzana que han encontrado en la comarca, y que esperan ampliar hasta el centenar.

Frutos rojos, variedades de pera o de cereza de montaña son otras de las frutas que se quieren recuperar, junto a las hortalizas, judías o hasta avellanas que se cultivan en las ocho fincas experimentales que tienen en la comarca. Allí se trasladan las variedades que primero crecen en un vivero, tras un minucioso trabajo de campo en busca de las semillas, que en muchos casos solo conservan los más longevos de la zona. “Al final llevamos ya muchos años con esta tarea, y la gente que puede tener semillas te avisa cuando encuentran nuevas variedades”, explican desde Arto, en un trabajo que les ha permitido también estudiar algunas de los variedades de la zona y sus particularidades. “Todas las judías cuando se cultivan juntas tienden a formar híbridos, pero hemos detectado dos tipos autóctonas en las que eso no se produce”, comenta Juan Gracia como curiosidad, apelando a que las características climatológicas de la montaña son favorables para el crecimiento de algunas variedades. “La diferencia de temperatura entre el día y la noche que tienen lugar en las altas latitudes son claves”, comentan, aunque la comodidad haya hecho que los cultivos se trasladen al llano.

Otro de los fines últimos del trabajo que se lleva a cabo desde Arto es ofrecer más opciones a los jóvenes para quedarse en el territorio. “Aumentar las posibilidades del sector primario como forma de vida”, dicen. En ese sentido y en relación también a su labor por la preservación del patrimonio genético y etnológico relacionado principalmente con las especies vegetales y también animales del Sobrarbe, la agrupación cuenta con el respaldo de diversas administraciones, que son las que dan pueden sostener su labor, ya que se trata de una asociación sin ánimo de lucro. De esta manera, han trabajado de manera conjunta con diversos ayuntamientos de la zona, con la propia comarca del Sobrarbe, con cooperativas agropecuarias o a través de diferentes proyectos del departamento de agricultura del Gobierno de Aragón.

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