Reabre el bar López de Graus, con 150 años de historia

Después de unas semanas cerrado para realizar los cambios imprescindibles, el prestigioso Bar López de Graus ha abierto este jueves de nuevo sus puertas con una nueva dirección que pretende mantener con mínimos cambios la línea marcada por la familia Olivera-López, titulares del establecimiento en los últimos 150 años.

Vicente Olivera y su mujer Fina Buisán, representantes de la cuarta generación de hoteleros grausinos, estuvieron al frente de este histórico bar hasta la finalización de las fiestas patronales de la localidad, momento en el que pusieron punto y final a una larga trayectoria en la que se han sabido ganar el respeto y la amistad de todos cuantos les han tratado.

Ahora, tras unas cosméticas reformas en el bar y otras más profundas en zonas como los aseos, Carlos Pallás y Laura Gil, dos profesionales con una ya larga andadura en diversos establecimientos ribagorzanos, tomaban desde este jueves el relevo con la idea de cambiar muy poco la dinámica de funcionamiento del establecimiento ya que sostienen que algo que funciona no hay que tocarlo. Lo que sí quieren poner es una zona de comedor, ya que la restauración ha sido hasta ahora el campo en que se han movido.