INMIGRACIÓN

En Aragón se autorizan en año y medio más de 7.000 reagrupaciones familiares de inmigrantes

Las solicitudes han sufrido un parón en 2008, provocado en parte por la crisis económica que frena a los extranjeros.

Más de 7.000 reagrupaciones familiares de inmigrantes se han autorizado en Aragón en el último año y medio. Concretamente 7.201, según los datos facilitados por la Delegación de Gobierno, recibieron el visto bueno entre enero de 2007 y este pasado mes de junio. El bum de las solicitudes de las personas que regularizaron su situación en 2005 ha pasado. La crisis económica hace mella y ha provocado que muchos extranjeros perciban que no es un buen momento y se lo piensen antes de iniciar el complicado papeleo.


La provincia de Zaragoza registra el mayor número, con 5.499 reagrupaciones concedidas (3.708 el año pasado y 1.791 en lo que va de 2008), frente a las 864 contabilizadas en Huesca y las 838 en Teruel (564 en 2007 y 274 este ejercicio). Los marroquíes son con diferencia los que más la piden (en Zaragoza la obtuvieron 1.232 en este periodo), seguidos de los ecuatorianos (976), chinos (580) y colombianos (575).


Hay que tener en cuenta que estas cifras reflejan las reagrupaciones otorgadas en nuestro país, pero no el número real de las efectivas. Una vez que los interesados consiguen la luz verde en España para traer a los suyos, estos tienen que lograr el visado consular en su país de origen. Este es el trámite donde surgen más inconvenientes y se produce la mayor cantidad de denegaciones.


Actualmente los inmigrantes pueden reagrupar a sus cónyuges (siempre que estén casados), hijos menores de 18 años, padres y suegros. Para ello, a grandes rasgos, necesitan tener más de un año de residencia en España y con el permiso renovado, justificar ingresos económicos suficientes, disponer de una vivienda en propiedad o alquiler que reúna condiciones y, en el caso de los progenitores, demostrar una dependencia económica mediante el envío periódico de dinero.


Esta situación podría cambiar. El Gobierno español ha anunciado una reforma de la Ley de Extranjería que, entre otras medidas, plantea restringir la llegada de madres y padres. Hay que esperar su concreción. "La reagrupación familiar viene regulada por una directiva europea que no se puede vulnerar, y que deja la puerta abierta a que cada país regule en algunos aspectos el tema de los ascendientes, que podría limitarse, pero no en el caso de cónyuges e hijos", explica Pascual Aguelo, abogado experto en temas migratorios.


De hecho, añade que el Ejecutivo también ha mostrado la "intención" de facilitar los procedimientos en consortes e hijos. "Incluso se habla de permitir que los reagrupados puedan llegar con una autorización de trabajo, mientras que ahora tienen la limitación del primer año de estancia", comenta Aguelo. El posible endurecimiento ha provocado "expectación", como dice este profesional, pero de momento "ni siquiera hay una propuesta concreta, se ha hablado y se ha dicho".


La reagrupación familiar ha sufrido un frenazo del 19% en el ámbito nacional. Aragón no es ajeno a esta tendencia. "La crisis laboral y las situaciones económicas más precarias disuaden los planes de reagrupación de muchas personas. En general, tanto en los despachos como en los servicios asistenciales hay más consultas sobre el tema de los retornos y sus condiciones", reconoce Pascual Aguelo.


La misma percepción tiene Iván Jiménez-Aybar, abogado y director de Trayectus, consultoría de inmigración y extranjería: "No va a hacer falta que el Gobierno aplique ningún endurecimiento, ya lo está haciendo la economía, la gente se está quedando sin pisos ni trabajo".


Iván Jiménez-Aybar subraya las "cortapisas" a la hora de lograr el visado final en los países de origen. "Es un buen modo de adulterar el sistema de reagrupación familiar, con su exceso de celo se extralimitan en sus competencias", opina. En el último año, ha visto aumentar las negativas a los visados, especialmente en Marruecos.