PRECAMPAÑA ELECTORAL

El voto útil y la caída de Chunta beneficiarían a los socialistas

Uno de cada cinco votantes nacionalistas en 2004 darían su apoyo ahora al PSOE, que recoge votos de todas las formaciones.

El Partido Popular es, una vez más, la formación política que tiene mayor fidelidad entre los electores que decidieron votarle en 2004. El 83,8% de sus votantes aseguran que volverán a otorgarle su confianza en marzo. Sin embargo, el gran beneficiado en esta ocasión por el denominado "voto útil" es el PSOE, que además conseguiría mantener fiel a su electorado. Es la única formación que, según la encuesta de A+M para este periódico, recogería votos de todas las demás, y muy especialmente de aquellos aragoneses que hace cuatro años optaron por Chunta, o en menor medida, por Izquierda Unida.


De hecho, más de un 20% de quienes depositaron su confianza en los nacionalistas, votarían ahora por el PSOE. Además, entre quienes no tenían en 2004 edad para participar en las elecciones generales también arrasarían los socialistas (recogerían el 42,4% de las papeletas de los nuevos electores, frente al 18,2% de los populares).


La encuesta revela que la migración de voto castiga a CHA, hasta el punto de que solo poco más de la mitad de sus electores en 2004 repetiría ahora su apuesta electoral. Además, no logra compensar esta pérdida, ya que no recibe votos de ningún otro partido, salvo unos testimoniales del PSOE (0,5%) y del PP (0,1%). Tampoco convence entre quienes no tenían edad en 2004 para participar en las elecciones: solo un 3,1% de los nuevos votantes que dicen que acudirán a las urnas asegura que les votará, cuando hace años llegó a aglutinar a un 70% de ese colectivo.


De no conseguir movilizar al 16% de sus votantes que aún hoy se declaran indecisos, el sondeo confirmaría los peores temores de los dirigentes nacionalistas, que no conseguirían reponerse del batacazo sufrido en las autonómicas de mayo, ni volver a recuperar la sintonía con el electorado más joven, tras su enfrentamiento con Chobenalla (readmitida ya como organización juvenil tras su expulsión en 2004).


El relevo como cabeza de lista al Congreso por Zaragoza tampoco parece haber cuajado. El nuevo candidato, Bizén Fuster, no aparenta tener, de acuerdo con los datos del sondeo, el tirón que hasta ahora se le presuponía a José Antonio Labordeta.


Otro partido que también sufre debido a la fidelidad de voto, aunque en menor medida, es el PAR. De hecho, un 10% de sus votantes de hace cuatro años se repartirían ahora entre el PP (un 7,1%) y el PSOE (un 3,5%).


En cambio, otra formación que sabe lo que es verse perjudicada por el voto útil en las elecciones generales -Izquierda Unida- aguanta el tirón en estos comicios. Tiene una fidelidad del 81,2%, muy próxima a la de los votantes socialistas y populares, aunque solo recoge electores de otras formaciones, y tan apenas, del PSOE.


Por último, hay que destacar que, a un mes de los comicios, los mayores indecisos se encuentran entre las filas de los dos partidos con perfil aragonesista que concurren a las generales. Un 18,8% de los votantes del PAR no saben aún por quién apostar y lo mismo le ocurre a un 16% de quienes dieron su confianza en 2004 a CHA.