LEY DE LENGUAS

El PSOE llevará a las Cortes su propuesta de Ley de Lenguas antes de marzo

Aunque intenta negociar un texto de consenso mínimo con el PAR, el portavoz parlamentario socialista asegura que la decisión de presentar el texto es "irrevocable"

Javier Allué (izquierda) departe con Jesús Miguel Franco durante un pleno de las Cortes
El PSOE llevará a las Cortes su propuesta de Ley de Lenguas antes de marzo
ÓLIVER DUCH

El PSOE aragonés tiene decidido presentar en las Cortes autonómicas una proposición de Ley de Lenguas antes de marzo. Los socialistas están negociando desde hace semanas con el grupo parlamentario del PAR un texto de consenso mínimo para evitar una defensa en solitario del proyecto normativo, pero la proposición legislativa se presentará igualmente ante la Mesa del Parlamento aunque esos contactos fracasen.


El portavoz parlamentario del grupo socialista, Jesús Miguel Franco, aseguró ayer a este periódico que la decisión de llevar adelante la propuesta normativa sobre los idiomas minoritarios de la comunidad (las diferentes variedades dialectales de aragonés y catalán) es "irrevocable". El texto, por lo tanto, una vez que no ha sido posible como proyetco de ley del Ejecutivo aragonés, se debatirá en la Cámara autonómica aunque solo parta con el apoyo de los treinta diputados socialistas (la mayoría parlamentaria es de 34).


No obstante, tanto Franco como su homólogo del PAR, Javier Allué, confían en que durante enero y febrero se puedan encontrar suficientes puntos de encuentro como para que la proposición de ley salga adelante con la abstención o incluso el apoyo de los aragonesistas, lo que evitaría la situación siempre chocante de que los dos grupos del Gobierno voten con signo opuesto una propuesta legislativa.


El acuerdo, por mínimo que pudiere ser, se antoja de todas formas harto complicado. Al PAR le re sultará muy difícil explicar la oposición radical desde el Gobierno a una normativa que regule el uso del aragonés y el catalán en la comunidad para luego darle luz verde en las Cortes.


Solo una rebaja sustancial de las aspiraciones plasmadas por los socialistas en el borrador de proyecto legislativo de la DGA podría justificar ese cambio de posición. Pero el núcleo dirigente del PSOE aragonés ha mostrado en repetidas ocasiones una especial y personal vinculación con la propuesta normativa, lo que dificulta en extremo una negociación de la misma a la baja.