ECONOMÍA

El PSOE aragonés da por buena la financiación sin exigir ningún cambio

El PAR mantiene su rechazo y exige a Iglesias que consiga compensacionesEl presidente, que comparecerá en las Cortes, cree que su socio podrá apoyar al final el sistema

El consejero Larraz (en el centro), ayer, durante la reunión informativa con los portavoces de Economía de las Cortes.
El PSOE aragonés da por buena la financiación sin exigir ningún cambio
CARLOS MONCÍN

La parte socialista del Gobierno de Aragón aceptará hoy en el Consejo de Política Fiscal y Financiera el modelo de financiación autonómica. Y lo hará sin introducir ningún cambio sustancial, pese a que el sistema incumple varios preceptos incluidos en el Estatuto de Autonomía y que Aragón pierde respecto a otras Comunidades. Y también sin contar con el respaldo de su socio en el Ejecutivo, el PAR, que mantiene su oposición al sistema.

 

En vano fueron los intentos del consejero de Economía y Hacienda, Alberto Larraz, por explicar con detalle las cifras del nuevo modelo durante una reunión con los portavoces de economía de las Cortes. Defendió que es "un buen modelo", que "vamos a ganar un volumen importante de dinero per cápita sobre todo para la financiación de la sanidad, la educación y los servicios sociales" y que "en el reparto global, Aragón no pierde peso y está por encima de la media". Por eso, solo planteará modificaciones "muy muy técnicas".

 

Larraz también destacó los 258 millones que recibirá la Comunidad del fondo adicional (alrededor de 160 este año y progresivamente más hasta los 258 en 2012); la mayor autonomía financiera gracias al aumento de entre un 5% y un 10% de la recaudación por impuestos del Estado; y la inclusión de Aragón en los fondos de baja densidad específico y de cooperación, que permite recuperar "la mínima cantidad" que se haya podido perder por la preminencia de la variable de la población en el cómputo global.

Iglesias-Biel, por teléfono

Además, aseguró -frente a las críticas de su socio y del resto de partidos- que el Estatuto se respeta "absolutamente" y retó al que opine lo contrario a "demostrarlo con números". En este sentido, insistió en que aspectos como la superficie se aplica ahora también en la sanidad y los servicios sociales y advirtió de que la población aragonesa está creciendo y, por tanto, el modelo se ajustará anualmente.

 

También el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, defendió el modelo y anunció que lo explicará en las Cortes, posiblemente a final de mes. Respecto al anuncio del vicepresidente y líder del PAR, José Ángel Biel, de que no iba a "tragar" con esto, Iglesias explicó que ayer mantuvo contacto telefónico con él y se mostró convencido de que una vez conozcan toda la información "lo podrán apoyar".

 

Sin embargo, fuentes de Vicepresidencia mantuvieron ayer que "este modelo es lesivo" y no cumple el Estatuto. Pero, pese a la profunda discrepancia con su socio en el Gobierno, de momento, las mismas fuentes eludieron ir más allá y pronunciarse sobre las posibilidades de una ruptura en la coalición por esta causa.

 

De hecho, como ya había anunciado el portavoz del PAR en las Cortes, Javier Allué, tras la reunión con Larraz, los aragonesistas van a exigir como salida a este conflicto fórmulas de compensación, conscientes de que el modelo no se puede modificar. Allué enumeró algunas de ellas: la gestión de obras hidráulicas, las inversiones en los presupuestos generales del Estado, infraestructuras, convenios bilaterales...

 

"Por mucho que seamos socios, no estamos dispuestos a asumir determinadas cuestiones. Se trata de salvaguardar los intereses aragoneses", advirtió Allué, que lamentó la falta de presencia del PAR en la negociación. No en vano, consideró que "el consejero representa más al PSOE que a los aragonesistas". Pero tampoco quiso pronunciarse sobre el futuro de la coalición. Se limitó a decir que se abren "varios escenarios e hipótesis" que variarán en función de las fórmulas de compensación que finalmente se aprueben y retrasó la resolución a después de verano. Allué quiso dejar claro que "el PAR va a exigir el máximo cumplimiento del Estatuto, a costa de todo".

 

En cualquier caso, estas diferencias podrían escenificarse y realmente tener consecuencias en la comisión de asuntos económicos, que debe ratificar el sistema de financiación y en la que el vicepresidente Biel tiene voto. No obstante, desde el PSOE recuerdan que este acuerdo es la base de los presupuestos de la Comunidad para los próximos años.