El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, defiende que el modelo de financiación autonómica debe evolucionar para que dependa cada vez más de las Comunidades, que deben incrementar en capacidad normativa y autonomía fiscal.

Ésa es una de sus propuestas de cara a la reforma del sistema de financiación autonómica y que adelantó a los medios de comunicación en el Pleno de las Cortes después de la reunión que los barones socialistas mantuvieron en el Palacio de la Moncloa ayer con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Para el jefe del Ejecutivo aragonés es "muy importante" que las Comunidades ganen en capacidad normativa y autonomía fiscal y que que la aportación directa de fondos del Estado sea menor, para que la financiación "dependa cada vez más de la voluntad de las Comunidades Autónomas".

Cada presidente socialista defendió ayer la posición que le da más ventaja, explicó Iglesias, quien enfatizó que Aragón, "que está en medio" en muchos de los parámetros, pretende que los factores que determinen el reparto estén "modulados", es decir, que haya una fórmula polinómica en la que el factor "población" quede modulada por otros.

De hecho, aseguró, hay autonomías que "comparten plenamente esta posición".

Insistió en que la fórmula que se pacte no puede ser la de "café para todos" y aunque prime el criterio de población, éste debe de quedar corregido por otros como la dispersión, el envejecimiento, la superficie o la responsabilidad fiscal.

Marcelino Iglesias abogó, asimismo, por que se mantenga un nivel de prestación de servicios similar en calidad todo el Estado, sobre todo en Sanidad, Educación y Servicios Sociales, y aseguró que pretende alcanzar, como en 2001, el apoyo unánime de las quince Comunidades implicadas en la negociación -todas menos País Vasco y Navarra, con un régimen propio-.

El presidente aragonés apuntó que en la negociación no ha percibido tanto una "batalla" entre las comunidades del PSOE y las del PP sino que hay algunas que "pueden conformar una uniformidad de criterios sin necesidad de que tengan el mismo signo político".