CONFLICTO POR LAS OBRAS ARAGONESAS

El obispo de Lérida plantea compartir los bienes y Milián le exige que los devuelva

La DGA cree que la oferta es "un síntoma de debilidad" y le vuelve a pedir que dé "la fecha y la hora de la entrega".

En el centro, Alfonso Milián y Joan Piris, el día que este tomó posesión como obispo de Lérida.
El obispo de Lérida plantea compartir los bienes y Milián le exige que los devuelva
JAVIER BROTO

Nueva vuelta de tuerca en torno al inacabable litigio de los 112 bienes sacros entre las diócesis de Barbastro-Monzón y Lérida. El obispo ilderdense, Joan Piris, rescató ayer la idea de hacer una declaración de patrimonio cultural común y compartir el arte "sin discutir la propiedad". Su homólogo barbastrense, Alfonso Milián, no se opone a esta propuesta, pero dejó muy claro que "todo pasa por la devolución". También el Gobierno de Aragón coincidió en volver a reclamar el retorno inmediato de las obras.

A cinco días del juicio sobre la propiedad de más de 80 piezas que se celebrará en Lérida promovido por la Asociación de Amigos del Museo Diocesano, Piris desveló la propuesta que ha planteado a la Nunciatura y al secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone.

"Eso quiere decir yo no entraría a discutir más la titularidad ni la propiedad, eso es cosa de otros. Si esto fuera aceptado, por lo menos podríamos mirar de otra manera el conflicto", señaló el prelado durante un almuerzo con representantes de los medios de comunicación de Lérida.

"Se lo he dicho a todos los representantes de la Iglesia con los que ha tenido ocasión, Secretaría de Estado, Nunciatura... Supongo que lo estudiarán", afirmó el obispo, que sobre la ubicación de las obras dijo que podrían estar seis meses en un sitio y seis en otro "y no pasaría nada". "Es como se hace en exposiciones itinerantes en todos los museos del mundo, sin decir de quién es ni de quién no es. "Y si no -propuso-, hacemos facsímiles y unos aquí y otros allá, siempre se puede arreglar, aunque no es tan fácil, si no estaría hecho".

Piris detalló que ha comunicado su propuesta en conversaciones, sin documentos formales por medio, aunque explicada por escrito. "Creo que este sería un camino de solución, no será el único, pero mientras las cosas estén en los tribunales es inútil hablar de lo que podría ser, es imposible", consideró.

"Es como cuando se casa un hijo"

"La Iglesia tiene derecho a cambiar los límites diocesanos, como consecuencia de aquello viene eso de repartir los bienes", dijo el obispo, que equiparó el conflicto con el reparto de bienes de cualquier familia. Para él, es como cuando se casa un hijo y se lleva una parte de los bienes que son de todos: "Podemos compartir, continúa siendo nuestro, independientemente de quién sea el titular real en el papel. Es de la misma familia, son bienes eclesiásticos", insistió.

Mientras, el obispo de Barbastro-Monzón reconoció que su homólogo no le había planteado en ningún momento esta propuesta, y recalcó que "hay una sentencia de la Signatura Apostólica que, después de más de 20 recursos de Lérida, determina que esas obras son propiedad de las parroquias, que ahora pertenecen a esta diócesis, y que me obliga a mí, a él (Piris) y a todos".

"Siempre he dicho que estoy dispuesto a que las obras se puedan exponer en cualquier sitio porque entiendo que el arte es patrimonio de la humanidad, pero el requisito imprescindible es la entrega de las obras", subrayó. "Se puede ir hablando ya, pero todo pasa por la devolución", insistió, al tiempo que subrayó que "quien comparte es el propietario".

"Además, en el convenio de 30 de junio de 2008 que firmamos con el entonces administrador apostólico de Lérida, Xavier Salinas, y el nuncio, en el que se reconocía la propiedad de las parroquias y que había que entregarlas, también se hablaba de que hubiera una colaboración, e incluso de crear una comisión de la que no hemos vuelto a hablar", admitió.

Milián también mostró su intención de contactar en los próximos días tanto con Piris como con el nuncio, Renzo Fratini, con el que coincidió el pasado miércoles en Santo Domingo de la Calzada (La Rioja). Hablaron de los bienes, comentó, pero no de la propuesta del obispo de Lérida.

Por su parte, la DGA considera esta maniobra "un síntoma de debilidad, porque la propiedad de los bienes ya ha sido determinada, y lo único que tiene que decir Piris es el día y la hora de la entrega".

Y desde la Generalitat reiteraron su "oferta de diálogo, pero siempre con la condición previa de que reconozca el proceso legítimo de la constitución de la colección (de la que forman parte las obras, según Cataluña)".

Esta no es ni mucho menos la primera vez que desde la diócesis de Lérida se propone compartir las piezas en litigio. De hecho, los antecesores de Piris, Xavier Salinas y Francesc Xavier Ciuraneta, también abogaron en su día por esta "solución", al igual que lo han hecho en múltiples ocasiones las instituciones civiles catalanas.