INFRAESTRUCTURAS

El mal estado de la vía del Canfranc obliga a sustituirla por completo en tres años

La obra comienza este mes en el tramo más deteriorado, de Anzánigo a La Peña, con material reciclado de Cataluña.Más de la mitad de esta inversión, que suma 10 millones, se presupuestó en 2008 y no se gastó un euro

La antigüedad y el lamentable estado de conservación de la línea del Canfranc ha obligado finalmente a planificar la sustitución completa de la vía, que se acometerá por fases a lo largo de tres años. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) tiene previsto invertir cerca de diez millones de euros en estos trabajos, que comenzarán a finales de mes en el tramo más deteriorado, entre Santa María y La Peña y Anzánigo.

 

Gran parte de esta inversión llega con retraso y se debe ejecutar con urgencia, ya que el Ministerio de Fomento incluyó una partida de seis millones de euros para la conservación y mantenimiento de la línea entre Jaca y Canfranc en los presupuestos de 2008 y no llegó a utilizar ni un euro.

 

El objetivo es garantizar la fiabilidad y seguridad en la explotación ferroviaria entre Huesca y Canfranc, donde solo se ha renovado en los dos últimos años la traza ferroviaria entre Caldearenas y Jaca, sin llegar a mejorar el trazado. Los planes incluyen la retirada de todas las traviesas y el carril existente desde la variante de Huesca hasta Caldearenas y de Jaca a Canfranc, que suman en total 89 kilómetros.

 

El ADIF no ha tenido otro remedio que actuar porque la línea está muy deteriorada, hasta el punto de amenazar su propia explotación al incumplirse los trabajos mínimos de conservación de un trazado convencional.

 

Los trabajos comenzará en breve en los seis kilómetros que separan Santa María y La Peña y Anzánigo, donde se instalarán también encarriladoras en el tramo metálico que salva el embalse para evitar que puedan descarrilar los trenes. En este tramo hubo un descarrilamiento a finales del 2008 y a mediados de enero sufrió el desprendimiento de una gran roca, a nueve kilómetros de la terminal de Anzánigo, que cortó el tráfico.

 

La serie de descarrilamientos por el mal estado de la infraestructura es extensa. En marzo de 2009 hubo otro incidente en Riglos, en el que se vio afectado un mercancías cargado de maíz.

 

La renovación de la vía y las traviesas se hará con material de segundo mano, reciclado de Gerona. Esta misma solución se ha tomado en otras líneas del país en las que las traviesas aún son de madera. El ente público que gestiona la infraestructura ferroviaria española decidió enviar todo el material en camiones en vez de recurrir al ferrocarril y lo tiene acumulado en la estación de Santa María y La Peña. "Es una solución idónea, ya que sus prestaciones son muy superiores aunque se trate de un material de segunda generación. Permitirá soldar los raíles, con lo que se mejorará la explotación y reducirá las tareas de mantenimiento", indicaron fuentes ferroviarias.

 

Con las piezas ya acumuladas en la estación se podrá llegar a sustituir unos ocho kilómetros. "Se pretende ejecutar sin cortar el tráfico ferroviario, por lo que se trabajará de noche", señalaron.

 

Desde el gabinete de comunicación del ADIF no se concretó hasta cuándo durarán los trabajos, aunque las citadas fuentes ferroviarias señalaron que se alargarán, al menos, tres años.

 

Al mismo tiempo, se están suprimiendo los pasos a nivel existentes en el tramo comprendido entre Ayerbe y Caldearenas, que se sustituirán por otros elevados para salvar la vía. En estos momentos, se trabaja en la cimentación de las estructuras.

Siete años a la espera

La última reparación importante de la vía se realizó a principios de 2003, a raíz de una serie de descarrilamientos. El Ministerio de Fomento planteó entonces la intervención como una actuación de emergencia, destinada a mantener el servicio mientras se modernizaba la vía por completo. Sin embargo, ha seguido en servicio hasta ahora con un mantenimiento de mínimos que ha provocado múltiples incidencias.

 

La Coordinadora por la Reapertura del Ferrocarril Canfranc-Oloron (Crefco) ha venido reclamando la sustitución de una vía que se encuentra "en tan penosas condiciones", por lo que aplaudió que se haga aun con material usado.