'Sin estudios o estudios primarios' y 'Primera etapa de educación secundaria'. Con estas categorías formativas figuran el 70% de los inscritos como demandantes de empleo en Aragón. Este porcentaje aglutina a más de 70.000 demandantes de empleo, teniendo en cuenta que el paro registrado en noviembre superó la barrera de las 100.000 personas.

El número de personas registradas en el INAEM durante todo el año 2011 con una formación equivalente o inferior a la de la primera etapa de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) ha oscilado entre las 63.868 que se registraron en agosto y las 70.194 inscritas en noviembre, según datos recogidos por el Instituto Aragonés de Estadística (IAEST).

Precisamente es este mes el que presenta mayor número de registrados con la formación referida, aunque la mayor tasa es la que arrojan los meses de marzo y abril, cuando los desempleados sin estudios o con la primera etapa de ESO representaron el 70,8% del total de demandantes de empleo en Aragón.

Estos datos se agravan si se comparan con los registrados por el IAEST en el año 2005, cuando la economía española aún no había descubierto sus peores fantasmas. Entonces, la cifra de desempleados sin estudios secundarios también era considerable, en torno al 65%, pero de media, era unos cinco puntos porcentuales inferior a la actual. 

El 'boom inmobiliario', una de las posibles causas

Desde que pinchó la ‘burbuja’ inmobiliaria han sido muchos los expertos que han alertado de la situación de miles de jóvenes que dejaron sus estudios secundarios durante los años del ‘boom’ para trabajar en la construcción de viviendas.

Tras la paralización del sector en el año 2008 --cuando los visados para construir viviendas libres cayeron desde las 532.117 unidades de 2007 hasta las 237.959 de 2008, según datos del Ministerio de Fomento--, muchos de los jóvenes que habían abandonado el instituto por los suculentos sueldos de la construcción se vieron en la cola del paro y sin el título más básico para acceder al mercado laboral.

Los que se afanaron en conseguir esa titulación fueron muchos, como reflejan los datos estadísticos del Ministerio de Educación referentes a los alumnos matriculados en ESO en centros de enseñanza para adultos. Las matrículas de ESO en estos centros crecían a la vez que las estadísticas de la construcción se desinflaban.

Entre los cursos 2004-2005 y 2007-2008, los alumnos registrados en estas enseñanzas oscilaban entre las 119.000 y las 123.000 personas. En el curso 2008-2009, la cifra de alumnos subió hasta superar las 140.000 personas, mientras que los matriculados en el pasado curso 2010-2011, la última cifra disponible, se situó en 175.580 personas. Durante ese periodo, en Aragón, se apuntaron a estos centros para cursar la ESO 3.836 alumnos.

Cifras superiores a la media nacional

El porcentaje de personas sin estudios secundarios que demandan empleo en toda España es 15 puntos porcentuales inferior al de la comunidad autónoma aragonesa. El 55,7% de los parados españoles han cursado, como máximo, la primera etapa de ESO o la formación e inserción laboral correspondiente, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del INE. Algo más de 2,77 millones de personas.

De este grupo de personas, más de 59.000 son analfabetas, algo más de 933.000 solo han cursado la educación primaria y el resto, más de 1,78 millones de personas, no han superado la primera etapa de la ESO (los cursos de 1º y 2º, equivalentes a 6º y 7º de EGB).

Más estudiantes de FP que de Bachillerato

Según datos de la Consejería de Educación de la DGA, este curso las matrículas en grados medios y superiores de formación profesional han superado a las de Bachillerato en más de un millar y medio de alumnos.

Los matriculados en ciclos formativos han alcanzado las 17.745 personas, mientras que los alumnos de Bachiller han alcanzado la cifra de 16.145.