FAMILIA

El Justicia propone la acogida de ancianos en familias y la DGA dice que lo estudiará

Según el informe de García Vicente, los análisis y las quejas reflejan que en Aragón "faltan alojamientos alternativos".

El Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, insta al Departamento de Servicios Sociales de la DGA a valorar la posibilidad de implantar en la Comunidad un programa de acogida de personas mayores en familias.


Consiste en la integración temporal o indefinida de aquellos ancianos que se encuentren en situación de desamparo en el seno de una familia, sin que les una ningún parentesco, para garantizar la convivencia mutua, la salud y la seguridad y bienestar físico y psíquico. Así queda definido en la carta de recomendación que el Justicia ha enviado a Servicios Sociales.


La institución encargó varios informes en 2004 y en 2007 para analizar la situación de este colectivo, cuyos resultados, junto con las quejas recibidas, "ponen de manifiesto la insuficiencia o inadecuación de los servicios de atención residencial cuando prima la necesidad socioeconómica frente a la sanitaria, detectándose la falta de alojamientos alternativos que se pueden ofrecer desde los servicios sociales".


La Comunidad de Madrid fue pionera en desarrollar este sistema, que funciona desde 1993. Existe también en Galicia, Cataluña y Asturias. Ahora el Justicia pide que se baraje la posibilidad de implantarlo también en Aragón.


Desde el Departamento de Servicios Sociales del Ejecutivo autonómico se aseguró que, como todas las sugerencias que reciben del Justicia, se estudiará si la implantación de este programa en la Comunidad es viable. Se trataría de que el anciano destinara el importe de la ayuda económica que recibe a sufragar los gastos derivados del acogimiento. A cambio, la familia le prestaría atención y cuidados a la vez que respetaría su intimidad y fomentaría su integración social.


"La figura del acogimiento de personas mayores representa una opción beneficiosa para ellas y también para las familias, por lo que debería estudiarse la posibilidad de su implantación para los ancianos que están en situación de desamparo", explica García Vicente.


Edad media más elevada


El informe del Justicia recuerda que en 2002 Aragón era la región europea cuyos habitantes tenían una edad media más elevada. "A ella hay que unir la acusada regresión poblacional y la dispersión de núcleos de población", dice la carta. Esto hace que las personas más envejecidas vivan en los pueblos más pequeños y con menos servicios.


El IASS (Instituto Aragonés de Servicios Sociales) trasmitió en su día al Justicia que "según la experiencia, es en los contextos rurales donde mejor funcionaría el programa". García Vicente considera que, "por las características demográficas de la Comunidad", el programa podría tener buena acogida. "Se ofrecería una atención personalizada en un ambiente familiar alternativo al institucional", concluye la recomendación.