La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha subrayado este viernes que la cesión de agua de los regantes del Ebro para Barcelona no es inconstitucional porque es "una cesión gratuita", aunque será el Tribunal Constitucional el que deberá pronunciarse al respecto.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Gabinete, la vicepresidenta ha recordado que el Gobierno de Aragón ha anunciado que recurrirá en el Constitucional el trasvase de agua para Barcelona "porque entiende que la compra de agua a los regantes podría vulnerar la Constitución".

De la Vega ha puntualizado que el Gobierno "respeta plenamente" la decisión del Ejecutivo aragonés porque es "absolutamente legal" pero ha insistido en que la cesión de agua de los regantes de la cuenca del Ebro no es una venta, sino una cesión gratuita.

Ha avanzado que, por el momento, el recurso no afectará a las medidas de urgencia adoptadas por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para evitar que cinco millones de barceloneses se quedasen sin agua.

Ha recordado que el Ministerio realiza un "seguimiento puntual" de la situación y que, por ahora, no se dan las condiciones suficientes para paralizar el trasvase de agua a Barcelona.

"Si persisten las lluvias", ha reconocido, la situación puede mejorar pero "hoy por hoy no hay cambios en la posición del Gobierno porque no hay garantías para decir que en el futuro no puede haber problemas", ha insistido.

De la Vega ha defendido además la política de agua del Gobierno porque siempre ha tratado de garantizar el abastecimiento de agua a los ciudadanos "vivan donde vivan", partiendo de la solidaridad interterritorial y evitando la confrontación entre territorios.

En cualquier caso, los ciudadanos deben estar absolutamente tranquilos porque, ante este tema, porque el Gobierno "ha actuado siempre y seguirá haciéndolo" con "responsabilidad y prudencia" y tomando las decisiones adecuadas.