El nuevo fondo de inversión local que financia el Gobierno central dejará en los municipios aragoneses en 2010 unos 143,4 millones de euros. Un incentivo para las deterioradas arcas de los ayuntamientos que, además, se prevé que cree unos 5.000 puestos de trabajo. Como principal novedad está la posibilidad de que las corporaciones destinen hasta un 20% de la cantidad que les corresponde a financiar gasto corriente.

El delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, comunicó estos datos tras la constitución formal de la comisión de seguimiento de este fondo estatal, que está compuesta por representantes de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias (FAMCP) y por los agentes sociales (CREA, CEZ, Cepyme, UGT y CC. OO.), cita en la que se dio a conocer a estos organismos los cambios que se han introducido respecto a este año.

El nuevo programa pasa a denominarse Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local. Reparte en el conjunto del país 5.000 millones de euros, frente a los 8.000 del actual ejercicio. Según Fernández, la perspectiva adecuada frente a esta caída es clara: "Pensamos que de la nada a un fondo de 5.000 millones no está mal", manifestó el delegado.

Servicios educativos o sociales

En esta ocasión, los proyectos no solo podrán ir destinados a obras, sino que se puede reservar hasta una quinta parte de la inversión para gasto corriente, siempre que sea para la prestación de servicios educativos o sociales, principalmente relativos a la atención a personas en situación de dependencia. A este concepto se asignarán como máximo 28,7 millones en Aragón.

Además, se acota el tipo de proyectos que se pueden llevar a cabo dentro del fondo, y de hecho hay un apartado concreto que enumera las posibilidades. Hay tres líneas marcadas: sostenibilidad económica -en lo que entran parques tecnológicos o redes de telecomunicación, entre otros-, ambiental -eficiencia energética o movilidad urbana sostenible- o social -centros sanitarios o culturales-.

Para los municipios de menos de 2.000 habitantes, eso sí, se incluye un apartado específico con otras posibilidades más lógicas, como la mejora de redes viarias o la adecuación de entornos urbanos.

Un dato importante para los ayuntamientos es que la cifra de población que se toma para dividir las inversiones es el padrón que recoge el Instituto Nacional de Estadística (INE) a 1 de enero de 2008.

Respecto a la contratación de mano de obra, se mantiene la obligación de que los nuevos contratados estuvieran anteriormente en situación de desempleo, aunque en esta ocasión también se podrá incluir a autónomos. Además, se dará prioridad a los parados de larga duración (más de doce meses).

Otra de las novedades es en el dinero que las corporaciones recibirán en el momento de inicio de las obras. Si antes era el 70% del total, ahora aumenta hasta el 85%. No cambia, por contra, la cantidad máxima que podrán destinar los ayuntamientos a una sola obra (cinco millones de euros).

Por provincias, Zaragoza recibirá hasta 103,7 millones, Huesca 24,4 millones y Teruel 15,8. De entre los mayores municipios, el que más recibe con diferencia es la capital aragonesa, con 72,4 millones. A la oscense se destinarán un máximo de 5,5 millones y a la turolense, 3,7. Del resto, Calatayud tiene reservados unos 2,4 millones; Ejea, unos 1,9; Utebo, Monzón, Barbastro y Alcañiz, alrededor de 1,8; y Andorra, algo menos de un millón.

El delegado del Gobierno no pasó por alto las críticas que han surgido sobre, según dijo, el hecho de que este fondo "no resuelva el problema de la financiación local". "Pero esto se crea sobre todo para paliar los problemas de desempleo", especificó Fernández. Asimismo, se refirió a la menor creación de empleo prevista y señaló que, sin embargo, será de mayor calidad. Por último, el delegado reclamó de nuevo la "colaboración" de las diputaciones provinciales, a la vez que agradeció el papel que han llevado a cabo en el "asesoramientos" y la "ayuda técnica" que han prestado a los municipios de menor tamaño.