CARRETERAS

El Defensor del Pueblo urge a Fomento soluciones para la N-232 y la N-II

Cree que su «alta siniestralidad» debió impedir que se «aplazasen» las obras, pese a la crisis.

En la imagen, la cabecera de la concentración que hubo en la plaza del Pilar el pasado febrero.
El Defensor del Pueblo urge a Fomento soluciones para la N-232 y la N-II
CARLOS MONCíN

El Defensor del Pueblo ha instado al Ministerio de Fomento a que solucione de una vez la «alta siniestralidad» que registran los tramos aragoneses de la N-232 y la N-II. Además, le ha solicitado formalmente que aclare por qué ha ralentizado los proyectos para mejorar el estado de ambas carreteras en Aragón. Según consta en el informe que la Defensora del Pueblo en funciones, María Luisa Cava de Llano, ha remitido al Congreso de los Diputados, este organismo interpuso la queja ante el Ministerio de Fomento, en concreto la secretaría de Estado de Infraestructuras, tras constatar que el «mayor número de tramos con índice de riesgo elevado» están en Aragón y Asturias.


El informe del Defensor del Pueblo alude además a que su reclamación aún no ha sido contestada. Sin embargo, fuentes ministeriales negaron tener constancia de esa queja en concreto y explicaron que están «al día» en cuanto a la respuesta a los requerimientos que les traslada este órgano.


La denuncia del Defensor va más lejos de estos dos tramos y hace referencia de forma generalizada «al alto índice» de accidentes que presentan las carreteras en Aragón. Estas suman más de diez mil kilómetros de asfalto. Sin embargo, la cuarta parte de las muertes de tráfico se registran en dos tramos que apenas alcanzan juntos los 120. Se trata de la peligrosa N-232, entre Figueruelas y Mallén, y de la no menos polémica N-II, entre Alfajarín y Fraga. Desde hace algunos años, ambas vías aparecen siempre a la cabeza en el ranking de siniestralidad de Aragón. Son 36 las personas que se han dejado la vida en ellas desde 2009. Una estadística sangrante pero que no deja de crecer. De hecho, en estos primeros meses de 2011, ya se han producido dos fallecimientos.


La queja que el Defensor ha presentado tiene su origen en algunas denuncias que le han llegado a través del Justicia de Aragón. En este sentido, cada vez que la institución aragonesa pide explicaciones a un Ministerio, este rechaza contestar una vez que entiende que el Justicia aragonés no tiene jurisdicción para ello.


«De interés preferente»


En el informe que tiene ya el Congreso de los Diputados, el Defensor del Pueblo entra además en otras consideraciones vinculadas a estas carreteras aragonesas. Así, se muestra consciente de la situación de crisis y que, por tanto, algunas obras pueden ser aplazadas o ralentizadas en su tramitación. Sin embargo, rechaza que los tramos aragoneses de la N-232 y de la N-II que están sin desdoblar puedan verse afectados, ya que acumulan demasiados accidentes como para no acometer ya las mejoras. Resalta que «en esos tramos se han producido en los tres últimos años más de 200 accidentes con víctimas» y que pese a tener que ser «preferentes», sus obras «han sido aplazadas por el Ministerio de Fomento». «La cuestión planteada resulta de interés preferente al afectar a la seguridad de las personas», reitera el informe oficial.


El Ministerio de Fomento ha intentado en los últimos meses buscar soluciones alternativas en estos dos tramos, aunque todavía no se han plasmado. Hace ya más de un año, llegó a un primer acuerdo con la DGA para liberar peajes, pero la alta siniestralidad continúa al no incluir los camiones.