El Ayuntamiento de Zaragoza quiere iniciar las obras de construcción de la nueva Romareda en la huerta de Miraflores, en San José, en el segundo semestre de 2009. El Consistorio tiene previsto convocar, posiblemente el próximo mes, un concurso internacional de ideas que defina el diseño de las instalaciones, tras la decisión del PP de renunciar a su propósito inicial de recuperar el proyecto del arquitecto catalán Ricardo Bofill impulsado en la época de gobierno del alcalde José Atarés. El estadio podría constar entre 110 y 140 millones de euros y estar listo en 2011 o 2012, en función del proyecto que se apruebe.

Tras varios días de conversaciones con el PSOE, el portavoz del PP, Domingo Buesa, tomó la iniciativa ayer. Defendió que el equipamiento se ubique en suelos públicos de la huerta de Miraflores, dentro del sector conocido como 38/4. Reclamó que el estadio incorpore instalaciones comerciales y un mínimo de 45.000 espectadores, aforo que sería ampliable. No obstante, el acuerdo definitivo se cerrará antes del día 29 de enero.

El líder popular anunció que su formación política renuncia a una de sus exigencias recogidas en el acuerdo presupuestario con el PSOE: que el proyecto arquitectónico del nuevo estadio sea el de Bofill. Reconoció la existencia de problemas legales. "Con un profundo dolor de corazón, habrá que ir a un concurso para generar un proyecto definitivo", dijo.

Se mostró convencido de que el concurso estaría resuelto en abril y que el proyecto podría estar redactado en marzo de 2009 para proceder a la licitación de la obras, que podrían comenzar en junio de ese mismo año.

Buesa quiso concretar al máximo la ubicación del campo en el sector 38/4, que tiene una extensión total de unas 60 hectáreas. Propuso que las instalaciones se levanten junto al Tercer Cinturón. La proximidad de la estación de cercanías de Miraflores y del pabellón Príncipe Felipe fueron dos valores destacados por el PP.

Aseguró que el campo dispondrá de unas 9 hectáreas y que al lado, en una parcela de 15 hectáreas para usos productivos donde también se está estudiando situar el estadio, se podrían incorporar aparcamientos en superficie y equipamientos comerciales que completarían la oferta deportiva. Eso obligaría a rehacer el plan parcial del sector 38/4, que ya está presentado pero que aún no ha sido aprobado.

Coincidencia con el PSOE

El portavoz del PSOE, Carlos Pérez Anadón, se mostró satisfecho con la posición del PP. "La ubicación nos parece de las más aceptables", declaró. No obstante, prefirió esperar cuando se le preguntó por el emplazamiento exacto del campo dentro del sector 38/4, ya que habrá que negociarlo con el resto de los grupos y con los promotores de los suelos.

"La propuesta del PP tiene un alto grado de coincidencia con el trabajo que ha llevado a cabo el PSOE en los últimos días", declaró Carlos Pérez, que mostró su satisfacción por el hecho de que los populares "se sientan cómodos con las propuestas de acuerdo" que han hecho los socialistas.

Respecto a los plazos, afirmó que los planteados por el PP son "optimistas", pero se mostró convencido en que como tarde las obras del campo podrían comenzar a finales de 2009. También aceptó la propuesta del concurso de ideas para definir el diseño del campo, en lugar de recuperar el proyecto de Ricardo Bofill.

"Lo importante es el consenso de este proyecto, que ya apoyan 28 concejales de los 31. Y no renunciamos a que lo respalden todos", afirmó Pérez en referencia a CHA, único grupo opuesto al plan. El portavoz adjunto de Chunta, Juan Martín, avisó de que la iniciativa responde a "intereses inmobiliarios y especulativos".

Además del gobierno PSOE-PAR y el PP, IU también defendió el traslado. "Miraflores cumple los requisitos de IU de forma bastante satisfactoria", aunque condicionó su apoyo a que aclare la financiación del campo y se den garantías de que no se "especulará" con el solar de La Romareda.