PP/ARAGÓN

El PP-Aragón pierde aún más presencia en la dirección nacional del partido

Rajoy no propone ningún sustituto aragonés tras la salida de Gustavo Alcalde de la ejecutiva nacional.

En primera fila, Mato, Rudi, Rajoy, Alcalde y Plantagenet en el último congreso del PP-Aragón
El PP-Aragón pierde aún más presencia en la dirección nacional del partido
J.M. MARCO

El PP-Aragón no solo no ha ganado presencia en la dirección nacional de su partido, sino que acaba de perder la mitad de la poca que tenía. Su líder nacional, Mariano Rajoy, no ha propuesto a ningún dirigente aragonés que compense la salida de Gustavo Alcalde de la ejecutiva nacional del partido. Luisa Fernanda Rudi ya era miembro, por lo que en estos momentos está ocupando tanto su plaza de vocal electa como la que corresponde al PP-Aragón. De esta manera, la formación aragonesa ha pasado de contar con la escasa representación de 2 de los 89 miembros a tener un único representante.


Fuentes del partido no descartaron completamente que se cubra el puesto que ocupaba Alcalde en algún momento, aunque no parece que haya interés por utilizar uno de los cinco puestos de designación directa que tiene Mariano Rajoy con alguien de Aragón. La razón por la que se ha llegado a esta situación no está clara, ya que el PP sí ha favorecido que no se mermase la representación de un territorio en situaciones similares. Es el caso de Extremadura, donde se optó por nombrar vocal electo al presidente saliente, Carlos Floriano, durante el congreso de Valencia.


La decisión de incluir a algún otro aragonés en el principal órgano del partido corresponde a Rajoy. El mecanismo para hacerlo es en la cuota de vocales por designación directa del presidente o bien ya en un puesto de cierta responsabilidad (secretaría de área), lo que es improbable. Sin embargo, en la práctica es Rudi la que debe decidir primero si quiere que haya otro representante de la comunidad y, si es así, intentar negociarlo con Rajoy. También está la opción de que se considere adecuado que sea el único referente aragonés en la Ejecutiva de su partido.


No consta que ninguna de las personas que están actualmente en puestos de responsabilidad en el PP-Aragón hayan solicitado a Rudi ocupar ese puesto. En cualquier caso, tal como está el esquema y si Rudi tuviese alguna voluntad de hacerlo, tendría que proponer a algún presidente provincial (Antonio Torres, Carmen Pobo, Luis María Beamonte), a la secretaria general (Rosa Plantagenet), al portavoz de las Cortes (Eloy Suárez) a personalidades de peso dentro del partido (el presidente saliente, Gustavo Alcalde o el ex presidente de la DGA, Santiago Lanzuela) o a algún diputado o senador.


De momento, Rudi se ha centrado en recorrer la mayoría de las comarcas aragonesas con el objetivo de mostrar que el PP es un partido que se acerca a la ciudadanía y, a la vez, dejar claro que ella está en Aragón y no en Madrid. En su trabajo de cambiar la imagen de la formación ha demostrado que se ha hecho ya plenamente con el control interno del partido, más allá de que aún esté permitiendo ciertas concesiones en el Ayuntamiento de Zaragoza.


Sin influencia interna


Una de las tareas que tiene pendientes es que esa relevancia interna se traslade a la sede del PP-nacional, donde la división aragonesa que ahora dirige prácticamente no existe. De hecho, excepto los diputados Santiago Lanzuela y Ángel Pintado, el PP-Aragón no cuenta con representantes que tengan algo de trascendencia dentro del partido.


Esta falta de peso ha sido consecuencia de muchos años de gestión y es culpa compartida tanto de los presidentes regionales que la han precedido como de los provinciales, por el tipo de perfiles que aceptaron incluir en las listas al Congreso y al Senado en el pasado. Esta circunstancia permitió por ejemplo que el PP nacional apostase por el trasvase del Ebro sin contestación interna.