LA CRISIS LLEGA A LA EXPO

El apartotel, el balneario y el golf de Ranillas están en venta

La concesionaria se ve obligada a deshacerse de los principales equipamientos de la Expo para hacer frente a las deudas que acumula. Veinte empresas se han interesado, pero aún se tardará meses en abrir todos los negocios.

Las deudas acucian a la principal concesionaria de equipamientos del Parque Metropolitano del Agua, el grupo inmobiliario Dico, que se ha visto obligado a poner en venta el apartotel de Ranillas y las dos joyas con las que cuenta en Zaragoza, el centro termal y el campo de golf. De hecho, solo ha podido abrir parte de las instalaciones de golf porque fue lo único que tenía acabado cuando una de las empresas del grupo, Promodico, entró en quiebra el pasado mes de junio afectando en cascada al resto de líneas de negocio.


Las directrices iniciales del consejo de administación eran desprenderse únicamente del complejo hotelero, cuya obra se dejó a medias antes del verano, con el fin de obtener recursos suficientes para enjugar sus deudas y lograr fondos para rematar el centro termal. De esta forma, se abriría al público para generar ingresos.


La empresa madrileña lleva meses negociando con sus acreedores, pero sus graves problemas de liquidez le han obligado a cambiar sus planes y desde hace unas semanas ha puesto todos sus negocios en el meandro en venta. Esto incluye los usos comerciales del apartotel y el centro de ocio familiar, de 2.000 metros cuadrados, que aún debía construir junto a la Ronda del Rabal. "Preferentemente vendemos el hotel, pero también ofrecemos todo el conjunto porque la gente lo demanda. Lo más necesario y urgente es responder a las deudas contraídas, la necesidad obliga a deshacernos de lo que más deseábamos en Zaragoza", apuntaron ayer fuentes del grupo Dico.


Este mismo verano, la dirección aún confiaba en lograr un crédito para hacer frente a los pagos. La realidad es ahora muy distinta porque las negociaciones se están dilatando, dado que los potenciales compradores son conocedores de los problemas del grupo Dico y están forzando la situación "para obtener mejores precios y comprar en condiciones más ventajosas".


Las citadas fuentes del conglomerado Dico señalaron que una veintena de empresas inversoras, hoteleras y del sector termal, además de intermediarios, se han interesado por los equipamientos de Ranillas. Parte de ellos han visitado las instalaciones, y la última visita se hizo la semana pasada. Las cifras no han trascendido, dado que no se trata de una puja y se mantienen las negociaciones con sigilo y discreción.


Deuda millonaria


La expansión nacional del grupo inmobiliario manchego se fue al traste cuando Promodico presentó un concurso de acreedores en junio (la antigua suspensión de pagos), ya que la propia compañía reconoció una deuda de 250 millones de euros. Además de los negocios de Zaragoza, tenía 2.000 viviendas en construcción en distintos puntos de España y buena parte están paralizadas por la quiebra de Promodico.


La empresa matriz del grupo manchego, Dico empresarial, y su división especializada en explotación de aparcamientos, Geexpark, adquirieron el suelo del apartotel, de cuatro estrellas, y fueron adjudicatarios de las concesiones del balneario, del complejo termal y del centro de ocio familiar. Todos los negocios preveían inaugurarlos para la Expo, aunque solo han llegado a abrir el campo de golf.


El club social sigue cerrado a falta de su equipamiento, al igual que el balneario, cuya obra está ejecutada al 97% y tan solo requiere del remate de las acometidas y de las altas de los servicios. Para abrirlo se necesitará un mínimo de tres meses para probar todas las instalaciones. El personal, que ya estaba seleccionado y formado, no pudo incorporarse.


En el caso del apartotel, se dejó con la estructura y sus fachadas a medio ejecutar. Aún se debe acometer un 40% de la obra civil y luego equipar el edificio. En total, se podría requerir medio año para abrir al público cuando tenga dueño definitivo.