Cuatro colegios rurales se ven obligados a cerrar por falta de alumnos

Este curso pierden sus centros Escalona, La Melusa, Castejón de Valdejasa y Trasobares

Cuatro localidades aragonesas vivirán el martes día 8 un triste comienzo de curso. Trasobares y Castejón de Valdejasa en la provincia de Zaragoza y La Melusa (barrio rural de Tamarite) y Escalona en Huesca cerrarán sus colegios este año ante la falta de alumnos para mantenerlos abiertos. Educación todavía no ha ofrecido la relación oficial -la dará el viernes-, por lo que a esta lista podría unirse alguna otra escuela rural.

 

En Zaragoza, los dos colegios que cierran sumaban cuatro alumnos en total: uno en Trasobares y tres en Castejón de Valdejasa. El primero tendrá que desplazarse a diario hasta Tierga (a seis km) y los otros tres, a Ejea (a 25 km), según confirmaron los responsables municipales de las localidades afectadas. "Al pueblo le duele el cierre de la escuela, pero no queda otra. La pena es que ya no se volverá a abrir porque se cogerá el ritmo de que los críos vayan con transporte escolar a otros centros", lamentó Avelino Bonet, alcalde de Castejón de Valdejasa. Este explicó que solo quedaban tres niños de la misma familia en edad escolar.

 

En la provincia de Huesca, dos serán los centros que cierren: La Melusa, un barrio rural de Tamarite de Litera cuyo cerrozajo ya estaba anunciado, y el de Escalona, centro que Educación todavía no ha confirmado. Los motivos por los que sus pupitres se quedan vacíos para siempre son diferentes. En La Melusa, los tres únicos alumnos del centro situado en la finca de la Confederación Hidrográfica del Ebro del mismo nombre han finalizado sus estudios de Primaria e iniciarán el curso en un instituto de la comarca de La Litera. En Escalona, se quería mantener abierta la escuela un año más aunque fuera con tres alumnos -uno de 11 años y dos de 3-. Sin embargo, se hubieran visto abocados al cierre el próximo año, ya que el niño mayor tendrá que salir al instituto de Aínsa y no hay perspectivas de que entren más pequeños. Tanto cambio para los menores y la falta de servicios como comedor escolar ha hecho que los padres, que viven en Escalona y Santa María de Puértolas, prefieran matricular a sus hijos en otros centros de la comarca. Educación, que aún no ha confirmado el cierre del colegio, les ha otorgado como escuela de referencia la de Laspuña, aunque los progenitores barajan la alternativa de matricular a sus niños en Aínsa, donde sí hay comedor que evitaría que los pequeños tuvieran que hacer cuatro viajes al día.

 

Las características territoriales de Aragón obligan a la DGA a establecer normas flexibles sobre el número mínimo de estudiantes con el que se puede mantener abierto un centro. Mientras que en otras comunidades se cierran colegios si no se llega a los 15 niños, aquí se mantienen incluso con tres.