SANIDAD/ ARAGÓN

"El copago no es más que un impuesto sobre la enfermedad, y eso es injusto"

La presidenta de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, Carmen Ortiz, y el vicepresidente, Marciano Sánchez, visitaron ayer Zaragoza para preparar el congreso que esta organización celebrará en la capital durante el mes de noviembre.


Listas de espera que se cronifican, retrasos en las consultas, pacientes desorientados… ¿tan mal estamos?


Marciano Sánchez (M. S): Hay que partir de la base de que nuestro sistema sanitario es atípicamente bueno. Tenemos derecho a la atención gratuita en un altísimo número de prestaciones. Lo que pasa es que, en el resto del mundo se están incrementando las políticas privatizadoras, y eso es algo que ya estamos notando en nuestro país. Además, las transferencias abrieron una brecha entre Comunidades que, si se profundiza, pondrá nuestro sistema en peligro.


Mientras, en Aragón se ha reabierto el debate sobre la conveniencia del copago sanitario. ¿Qué les parece?


Carmen Ortiz (C. O.): En 1991 ya se planteó a nivel nacional, pero las soluciones no van por ahí. El copago puede crear diferencias entre clases sociales y quebrar la calidad del sistema. Hay otros problemas que hay que resolver antes: mejorar la organización, poner más medios y hacer una mejor medicina preventiva.


M. S.: El copago es totalmente injusto porque pone un impuesto sobre la enfermedad. Resulta incoherente ahora, cuando se va a eliminar el de patrimonio.


Habla de reforzar la prevención. ¿No está la Atención Primaria olvidada?


C. O.: La Atención Primaria es la puerta de entrada al sistema, pero las inversiones para sostenerla se han ido reduciendo. Es inconcebible que haya comenzado a haber lista de espera en los centros de salud. No podemos permitir que para que te vea tu médico de cabecera tengas que esperar hasta diez días.


M. S.: Por otra parte, ha habido un gran incremento de la población sin que aumentasen los recursos sanitarios. Si la Primaria funciona mal, se derivan más enfermos a la especializada que, por este motivo aumenta las demoras y, en consecuencia, crece la insatisfacción ciudadana.


Si a esto se suma la disparidad entre Comunidades...


M. S.: Aragón no está en una situación especialmente mala en comparación con el resto, sin que esto sea un canto al optimisto. Pero hay cosas en las que deberá mejorar por sus peculiaridades, como la dispersión demográfica o la geográfica.


¿Cree que las Administraciones Públicas están siendo honestas cuando informan a la población sobre las demoras o la situación real del sistema sanitario?


M. S.: En general, no. Habrá excepciones, pero a nivel estatal es muy difícil tener información actualizada sobre lo que está pasando en cada servicio de salud. Por otra parte, hay comunidades mejores que otras. Desde nuestro punto de vista, en Madrid no se da apenas información y la que hay está tergiversada.


C. O.: Sí que es cierto que el Ministerio ha hecho un esfuerzo, pero los datos no están actualizados.


En Aragón está pendiente un decreto que permitirá que, si en un mes alguien no ha ido a la consulta del especialista, pueda recibir asistencia privada.


C. O.: Esa no es la solución. Hay que dotar a los centros de salud de más medios diagnósticos para evitar que se acaben derivando pacientes a la privada. Actualmente, un 30% de los casos que llegan a los hospitales se podía haber resuelto antes. Hay que mejorar los circuitos entre Primaria y Especializada y garantizar la calidad.