Apesadumbrado tras haberse acercado a primera hora al lugar del accidente, el director general de GM España, Antonio Cobo, compareció ayer ante los medios para decir que lamentaba "profundamente" este suceso, el "más grave" ocurrido en los últimos 30 años con la flota de 150 autobuses que traslada a diario, en los distintos turnos, a entre el 70% y 80% de los trabajadores de la factoría zaragozana. Que en estos años no se haya registrado "un mayor número de accidentes constata la seguridad", afirmó, si bien, insistió en que la "prioridad" es atender y ayudar a las personas heridas y las familias de los 38 empleados que regresaban a casa, después de trabajar toda la noche, en el autobús siniestrado, que cubría la ruta 11 de Figueruelas a La Almozara.

"Hemos desplazado a los hospitales a personal de nuestro servicio de prevención y hemos habilitado un teléfono, 900 111 009, para ofrecer información actualizada", dijo el máximo responsable de GM. "Hay una gran consternación entre la plantilla. Están sin parar de sonar los teléfonos. No dejan de llamar los compañeros. Todos tienen algún vecino o amigo que podría estar en el autobús", explicó el presidente del comité, Juan Arcéiz: "Vamos a pedir una investigación exhaustiva de lo ocurrido a la dirección de Opel y a Tráfico para delimitar responsabilidades".

Tanto Arcéiz, como la secretaria del comité, Ana Sánchez, y los representantes de UGT y CC. OO., Pedro Bona y José María Fernando, respectivamente, acudieron a primera hora al lugar del accidente -como muestra la foto- y allí coincidieron con el director general de la planta, Antonio Cobo, y el director de personal, Pedro Escudero. "De los 38 accidentados, la mayor parte eran empleados nuestros, salvo el conductor y una persona de una empresa de servicios", aclaró Cobo, que dijo que también había estado con el director de Therpasa, a la que pertenece el autobús siniestrado, y que cubre -junto con las empresas Jiménez, Aneto, Murillo e Iñigo Martínez- las 20 rutas en turnos de mañana, tarde y noche que comunican la factoría con todos los barrios de Zaragoza. Además hay uno que para en Alagón y otro que entra en Utebo, Casetas y Monzalbarba. En este sentido, Cobo subrayó que "GM es muy exigente cuando contrata el transporte y pide toda la documentación de ITV de los vehículos y horarios y experiencia de los conductores. "Casualmente, esta misma semana, la Guardia Civil realizó una inspección en la que "todo" salió "bien". A falta de que la policía judicial termine las diligencias, la versión que dio Cobo es que "al parecer y aún sin confirmar, un vehículo interfirió ligeramente con el bus, este perdió el control y cayó a la zona de entrada de la estación".