CONVENCIÓN EN ZARAGOZA

Blanco pide defender a Zapatero y hablar «poco» del PSOE

Unos 2.500 militantes y simpatizantes socialistas, junto con la plana mayor del partido, buena parte del Gobierno y todos los candidatos autonómicos se reúnen desde en Zaragoza para analizar las recetas del PSOE a la crisis y a la mejora del funcionamiento del Estado de las Autonomías.

Discurso de José Blamco. Al fondo, Almunia y Chaves
Blanco pide defender a Zapatero y hablar «poco» del PSOE
ESTHER CASAS

Unos 2.500 militantes y simpatizantes socialistas, junto con la plana mayor del partido, buena parte del Gobierno y todos los candidatos autonómicos se reúnen surante todo el fin de semana en Zaragoza para analizar las recetas del PSOE a la crisis y a la mejora del funcionamiento del Estado de las Autonomías.


El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha llamado este sábado a los socialistas a «defender» al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y además, ante la llegada de las próximas elecciones autonómicas y municipales, les ha pedido que hablen «poco» del partido y más de los problemas de la gente.


Durante su intervención en la Convención Autonómica que el PSOE celebra en Zaragoza, Blanco ha querido hacer frente a «tanto ataque y tanta descalificación, se ha proclamado «orgulloso» de Zapatero, «de sus valores y de su coraje», y ha proclamado que nunca ha conocido «un socialista mejor».


Blanco ha subrayado que nadie como él ha hecho tanto por la protección social, la igualdad y los derechos, para después concluir: «Estoy seguro de que sentimos todos la obligación moral y política de defender a quien más nos defiende».


Ante los presidentes y candidatos autonómicos del PSOE, el 'número dos' del partido ha subrayado que de cara a las próximas elecciones «nada está ganado pero nada está perdido» y, por ello, ha llamado a los socialistas a hacer «lo contrario» de lo que a su juicio está haciendo el PP. «Hablemos poco de nosotros y mucho de los ciudadanos», les ha emplazado, tras reconocer, en tono irónico, que en los últimos días han abundado también las noticias en torno al propio PSOE.


Según Blanco, los 'populares' «se pasan la vida hablando de sí mismos» y de lo que «les conviene para volver al poder» y no de lo que necesita España para recuperarse, y por ello les ha acusado de «faltar el respeto a la democracia». En la misma línea, les ha advertido de que su empeño en convertir el 22-M en una antesala de las elecciones generales están «negando a los ciudadanos su derecho» a responder lo que se les pregunta.


»En el PP tienen tanta ansiedad que quieren jugar el segundo partido antes que el primero, pues perderán el primero y el segundo», ha dicho. De este modo, ha llamado a los socialistas, como «gente de bien», a trabajar para que el presidente del PP, Mariano Rajoy, en lugar de llegar al poder con «soberbia», consiga el récord de tiempo como líder de la oposición.

«Está ganado, pero está perdido»

Blanco ha vuelto a reprochar al PP el «festín» y la euforia de su reciente convención que, a su juicio, sólo sirvió para «hacerle la ola al patrón», y ha puesto en duda si el patrón era Rajoy o su antecesor, José María Aznar. Y, a los suyos, les ha subrayado que, de cara al 22-M, «nada está ganado, pero nada está perdido» y que no deben «ceder un centímetro» ni aceptar lecciones del PP, al que ha acusado de «exigir austeridad cuando está en la oposición» y «despilfarrar» donde gobierna.


Ante un PSOE aliviado por el acuerdo con los sindicatos para reformar el sistema de pensiones, ha dejado claro que entiende que «haya cierta preocupación por el coste electoral que puede tener la crisis», pero ha subrayado que habría tenido más coste no frenar el déficit, no haber hecho reformas y no haber defendido a España en los mercados internacionales. «Este partido no se ha arrugado jamás», ha proclamado, recordando que el PSOE ha superado muchos momentos de adversidad.


«Si no hubiésemos actuado con responsabilidad estaríamos dirigiendo al PSOE a una derrota segura y alejando la posibilidad de gobernar por muchos años», ha proclamado. «Primero está España y luego está el PSOE», ha añadido, acusando al PP de actuar justamente al revés. Según Blanco, Rajoy «ni está ni se le espera» cuando se le pide sentido de Estado porque «se quiere más a sí mismo que a España».

Críticas al PP

«La derecha siempre se ha querido más a sí misma que a su país y cualquiera sabe que los que van con la bandera más grande son los que tienen el patriotismo más pequeño», ha subrayado. De hecho, en esa línea ha atacado también al PP por sus posiciones sobre el Estado autonómico.


Es más, ha defendido que los gobiernos del PP demostraron que el centralismo «es el primer enemigo de la unidad de España», que «nada alimenta tanto a los nacionalistas como los nacionalistas de enfrente» y, en concreto, que nadie alimentó tanto «a los separatistas» como José María Aznar.


Para Blanco, el PP pretende «recentralizar el Estado» y «apagar» las comunidades autónomas, mientras que el PSOE quiere «conectarlas mejor» para que contribuyan a la recuperación económica. De este modo, ha hecho una defensa del Estado autonómico y ha acusado al PP de seguir en la «vieja idea de España» que consiste en «Madrid y alrededores».


A su juicio, el PP no quiere acercar los gobiernos a los ciudadanos, sino usar las instituciones donde gobiernan para confrontar y boicotear al Gobierno central. Los partidos políticos deben competir entre sí, ha dicho, pero los gobiernos tienen que buscar soluciones.


El 'número dos' del PSOE ha atacado especialmente los gobiernos del PP en Madrid, Murcia y la Comunidad Valenciana, y ha lanzado un aviso, que el PSOE no consentirá que alguien quiera «llevarse por delante» ni la educación ni la sanidad públicas, igual que la austeridad no puede llevar a «derribar los cimientos de una casa». La defensa del Estado del bienestar, ha subrayado, es algo que se decide en las urnas.


Eva Almunia pide «responder con argumentos»


Blanco ha intervenido en la inauguración después de la candidata socialista en Aragón, Eva Almunia, que ha llamado a los socialistas a no dejar una puerta sin llamar y a presentar argumentos y propuestas frente a cada reproche. Almunia ha advertido de que lo que está en juego en estas elecciones «no es el Estado autonómico sino una forma de gobernar», y se ha referido también a los gobiernos de Madrid, Valencia y Murcia.


Y, además, ha avisado de que «esta liga, le pese a quien le pese, no termina el 22-M», sino que el PSOE la va a jugar «pensando en las próximas generaciones». «Nosotros no estamos de celebración, estamos de concentración», ha dicho.


Tras declarar su «estupor» porque Rajoy haya puesto como ejemplo de gobernante a Francisco Camps y retratar a su rival, Lusa Fernanda Rudi, como «la que siempre se va», ha dejado claro que para el PSOE no debe ser una preocupación el PP, «un partido que sólo vive del espejismo de las encuestas, sino los ciudadanos».