RIBERA ALTA DEL EBRO

Más de mil padres de Pedrola rechazan que el nuevo colegio se haga fuera del casco urbano

El Ayuntamiento pedrolano y unos promotores firman un convenio urbanístico para construir el centro en la carretera de la ermita

La ubicación del nuevo colegio de Pedrola ha levantado una gran polvareda en esta localidad, donde los planes del equipo de gobierno han encontrado una fuerte contestación vecinal. Casi 1.100 padres de esta localidad han firmado un manifiesto en el que rechazan que el futuro centro escolar se levante fuera del casco urbano, en un sector situado en la carretera de la ermita que estaría vinculado a una recalificación urbanística.

 

El pleno del ayuntamiento pedrolano aprobó el pasado 23 de enero el convenio con dos particulares. Los promotores cederían al consistorio los 14.000 metros cuadrados necesarios para construir el colegio, con la condición de que se convierta en suelo urbanizable varias parcelas rústicas. Para llegar hasta esa zona hay que cruzar el Canal Imperial de Aragón y atravesar la carretera que lleva al puente sobre la N-232.

El convenio recibió el respaldo de los seis concejales del PSOE y del edil del PP, mientras que fue rechazado por los tres representantes del PAR y por el de IU.

 

Su aprobación sirvió asimismo de inicio para la movilización ciudadana. El 7 de febrero, el alcalde mantuvo una reunión explicativa con la APA del colegio Cervantes a través de una junta extraordinaria. Una semana más tarde, la APA realizó una votación en la que ya se expresó el rechazo al convenio urbanístico.

 

Fuera de este organismo, un grupo de padres pedrolanos impulsó una recogida de firmas. El pasado 27 de febrero entregaron al ayuntamiento 1.097 rúbricas. Si se tiene en cuenta que todos son mayores de edad, alrededor de la mitad de los 3.500 habitantes del municipio estarían representados.

 

Los promotores de esta iniciativa justificaban su postura en el "peligro" que supondría para los niños cruzar el canal y la carretera de acceso a Pedrola, en la existencia de "suficiente terreno" en otros puntos del casco urbano. Además, resaltaban que, en su opinión, un colegio debe ser "integrador de población", por lo que tendría que estar junto al resto de "centros de interés" del municipio, donde los menores realizan actividades. Por último, los firmantes destacan el hecho de que los niños ya no podrían ir por sí mismos hasta el centro educativo.

 

Los impulsores de la recogida de firmas hicieron ayer hincapié en que no les mueven "partidismos" y señalaron que el objetivo de la recogida de firmas es "hacer reflexionar" al ayuntamiento. "Les quitan a los niños la posibilidad de ir andando al colegio", apuntaron.

Posibilidad en la zona de Pardinas

Como alternativa, los padres proponen construir el centro escolar en la zona de Pardinas, un sector de casi 10 hectáreas situado junto al casco urbano. El alcalde pedrolano, el socialista José Ángel Zaldívar, calificó de "complicada" esta posibilidad por el elevado número de propietarios que tiene el suelo, 44. Aun así, Zaldívar añadió que intentaría "por todos los medios" impulsar ahí el colegio y recordó a continuación que el equipo de gobierno podía haber optado inicialmente "por las expropiaciones", pero que las rechazó.

 

"Tenemos el compromiso de la DGA de que si en noviembre ponemos un solar a su disposición, harán el colegio. De lo contrario, estaría en peligro", dijo tajante.

 

Por su parte, desde el PAR -grupo que presentará alegaciones al convenio-, el concejal Ignacio Torres se mostró en contra de construir en la carretera de la ermita el colegio por el "peligro" que supone y porque, según el edil aragonesista, "hay zonas mucho mejores, en las que solo tiene que negociar con los propietarios", declaró.