La vía verde del Tarazonica mejora su trazado por tierras aragonesas

Las obras ya están concluidas en la parte navarra, y ahora se va a acondicionar el tramo que discurre por la comarca. Al comienzo del camino en la localidad turiasonense se van a colocar bancos, mesas y árboles, pero esta no va a ser la única intervención. "Se va a desbrozar completamente a ambos lados de la vía y se va a reafirmar el suelo en un trazado de dos kilómetros por Vierlas, que es donde está más deteriorado tanto la zona de asfalto como la de arena", indica el presidente del consorcio y de la comarca turiasonense, Francisco Lamata. Además, aprovechando el espacio de la estación de Malón se procederá a su limpieza y se habilitarán áreas de descanso o merenderos. "Sanearemos un punto por donde pasa el agua de riego, ya que con el paso del tiempo se han ido sedimentado piedras y el tubo casi está ciego", añade.

Otra de las actuaciones importantes será la instalación de más lugares para suministro de agua. "Queremos una nueva fuente en el entorno de Vierlas, puesto que es cierto que la gente demanda más puntos donde se pueda beber agua o lavarse la cara, aparte de poder descansar. El problema es que para poner puntos de agua, tenemos que encontrar una conducción cerca, que solo están próximas a los municipios", explica el presidente del consorcio de la Vía Verde del Tarazonica.

Se espera que las obras se ejecuten con rapidez. Las lleva a cabo la empresa pública Tragsa, con una subvención del Ministerio de Medio Ambiente. La actuación es significativa y necesaria, ya que ha aumentado el número de usuarios.

"Son obras muy importantes dentro del trazado, puesto que estamos detectando que cada día la gente utiliza más esta vía, que la van conociendo. Nuestro deber es mantenerla y conseguir la conservación y la puesta en valor de este recorrido peculiar que une dos comunidades autónomas", asegura Francisco Lamata.

En la parte navarra del camino, se reparó el pavimentó, se completaron trabajos de desbroce y limpieza de taludes en la zona de Cascante. En febrero se plantarán 150 árboles a lo largo del recorrido y más ejemplares en las zonas de descanso y en la del monumento al Escachamatas, realizado con materiales ferroviarios en recuerdo a la identidad de la vía.