Grisel inaugura el Festival Tierras del Moncayo con la quinta edición del dance

La nueva edición del festival Tierras del Moncayo arrancó ayer. La localidad de Grisel volvió a ser la encargada de inaugurar esta programación, que recorrerá los 16 pueblos de la comarca con temáticas diferentes.

La V Feria de Dance, Música y Tradiciones Aragonesas congregó a cientos de personas en Grisel. El mal tiempo hizo peligrar el desarrollo de los actos, pero finalmente se pudo montar el mercado en los alrededores de la plaza de la iglesia. Había puestos de artesanía y gastronomía, entre otros.

Tras las compras, muchos visitantes se acercaron al castillo del pueblo donde estaba la exposición "Instrumentos musicales de tradición popular en Aragón". También hubo comida popular, talleres de instrumentos y de macramé. Aunque los protagonistas de la feria fueron los danzantes. Al grupo local le arroparon ayer compañeros de Casetas y de Novillas.

Tras los pasacalles, todos bailaron ante la atenta mirada de vecinos y visitantes. Empezó el grupo de Casetas, el más experto y el que con más fuerza chocaba sus palos -de hecho, hubo un pequeño incidente con uno de los danzantes y se rompió más de un palo de madera-. Les siguieron los de Novillas, un grupo muy joven, y la representación la cerraron los bailarines locales, que volvieron a actuar por la tarde para representar el dance de Grisel.

Han pasado cuatro años desde que un grupo de descendientes del pueblo decidieron recuperar esta tradición perdida, que no se bailaba desde el año 1958.

Grisel ha dado el pistoletazo de salida y, ahora, se sucederán las ferias hasta el mes de noviembre, cuando finalice el festival, aunque será en los meses de verano cuando se concentren la mayoría de las citas. Los temas alrededor de los que giran las ferias se repiten, y lo que quiere la comarca es presentar temas propios. "Estamos buscando poco a poco la especialización para que sea algo genuino y se vea que mostramos algo propio", finaliza el consejero de la comarca, Alberto Mesa.