El primer fin de semana de marzo comenzará la actividad en el Hotel Balneario Alhama de Aragón. Este centro termal es el resultado de un proyecto para reformar y unir dos antiguos balnearios de la localidad, el de Cantarero y San Roque, y aspira a ser reconocido como uno de los centros termales más avanzados de Europa. Las instalaciones ocupan 10.000 metros cuadrados y disponen de una amplía zona exterior. La actuación ha incluido la rehabilitación de cinco edificios y la construcción de otro de nueva planta con 4.000 metros cuadrados. El resultado, después de las complejidades técnicas que han ido surgiendo al recuperar dos viejos edificios, es un hotel balneario de cuatro estrellas con 121 habitaciones dobles y suites, seis salas de distinta capacidad para reuniones, restaurante, cafetería, centro termal, piscinas y jardines. "Hemos unificado los antiguos balnearios manteniendo su estructura exterior y estableciendo un diálogo arquitectónico entre lo viejo y lo nuevo", señala Urbano Rifaterra, representante de la propiedad y arquitecto de la obra.

En el interior se han conservado algunos de los elementos más destacados como las escaleras y el famoso baño del moro y de la mora, "quizás de los más antiguos de España porque datan de época romana", indicó. Más de 12 millones de euros ha invertido en este complejo Promociones Termales Caritum, empresa que pertenece a un grupo de hoteles de costa y de ciudad, y propietaria además de un balneario en Comarruga. "Nos interesa el turismo de salud y belleza además de la recuperación de recursos naturales como el agua, que aquí sale en cantidad impresionante, a una temperatura de 32 grados y con unas propiedad minero-medicinales fabulosas", explica Rifaterra.

Hace cuatro años, Promociones Termales Caritum adquiría los balnearios de San Roque y Cantarero y se iniciaba la demolición parcial de las zonas de los balnearios centenarios que no se podían aprovechar. A partir de ahí, durante dos años, se acometió la reconstrucción de los espacios, y, ahora, ya se comercializan las primeras reservas aprovechando que el 5 de marzo es festivo en Zaragoza.

De la gestión del hotel balneario se encargará la firma especializada Sercotel que impulsará la celebración de congresos y reuniones de negocio. "Nuestra cercanía a Zaragoza Madrid, Barcelona e incluso Valencia tiene que ayudarnos", indica Carlos García Conde, director del hotel. "Vamos a dedicar una parte importante de nuestros esfuerzos a traer eventos porque además abren el mercado al cliente individual", añade.

Para la puesta en marcha del complejo se precisará de una plantilla de 50 personas que ya ha empezado a seleccionarse y que podría crecer hasta las 70 en temporada alta. "Nuestra intención es contar con gente de la zona que está muy cualificada porque es de las que tiene mayor riqueza termal de la península", dice García Conde. "Vamos a insistir mucho en que al balneario se viene a hacer cosas y en restauración queremos que la gente disfrute con la comida, vamos a dar importancia a los aspectos nutricionales", comenta el director.

Rifaterra, por su parte, destaca el "fuerte" esfuerzo inversor que se ha hecho en un momento complicado, valora el apoyo del ayuntamiento alhameño y de la DGA, y solicita la actuación de las administraciones para convertir a la localidad en una auténtica villa del descanso. "Pedimos que se limpie el cauce del Jalón y que se ajardine como un paseo fluvial", señala. También que se dé otra salida por el exterior del casco urbano a los vehículos pesados que a diario atraviesan la localidad. Confían desde en que Alhama de Aragón puede ser una referencia a nivel termal como son ya La Toja y la ciudad alemana de Baden Baden.