Tarazona Monumental enseña a los niños las técnicas de restauración

Los niños que participan en el primer turno de los talleres de verano de Tarazona están aprendiendo diferentes técnicas de restauración, descubriendo así la importancia de la conservación del patrimonio. Como ya es tradicional, visitan en grupos el taller de restauración de la Fundación Tarazona Monumental.

“Cada año aumentamos la cifra de los niños que se acercan hasta aquí, y eso es una buena noticia, porque cuantos más niños alcancemos, muchísimo mejor porque queremos que conozcan la labor de la Fundación y en concreto lo que hacemos en el taller de restauración”, explica Isabel Ibáñez, técnico de Tarazona Monumental.

Son conceptos novedosos para los niños, pero que entienden a la perfección en cuanto reciben las nociones básicas. “Lo explicamos mediante una comparación de forma muy sencilla, les decimos que los restauradores son los médicos que se encargan de cuidar y reparar aquellas obras de arte que están deterioradas”, dice Ibáñez. Se hace de una forma “amena y divertida, con un vocabulario que ellos conocen perfectamente”, así, de una forma muy lúdica, se van introduciendo en el mundo de la restauración y del patrimonio.

Este verano, la iniciativa profundiza en la técnica de la reproducción de las esculturas, enseñando cómo se reintegran todas aquellas partes que faltan. “Trabajan los moldes, pintan las escayolas… así que les resulta muy entretenido. Con una lupa les explicamos la técnica del puntillismo, cómo se reintegran, cómo tienen que ser técnicas reversibles y que se puedan identificar perfectamente”, dice la técnico de la Fundación.

Además, como cada verano, la Fundación Tarazona Monumental vuelve a organizar juegos y talleres en la catedral de Santa María de la Huerta para niños de 4 a 13 años, y con la posibilidad de que vayan acompañados de un adulto. Los días 26, 27, 28 y 29 de julio se realizarán actividades y talleres variados, adaptados para las diferentes edades.

Tiene una duración de tres horas cada día, empezando a las diez y media de la mañana. El precio es de 6 euros por un día, o 20 euros por los cuatro. Los socios del Club de Amigos de la Fundación tienen un descuento del 50%. Las plazas son limitadas, por lo que es imprescindible reservar. Habrá un segundo turno del 16 al 19 de agosto.