EN LA APERTURA DEL AÑO JACOBEO

"El Camino representa nuestras más profundas aspiraciones y proyectos"

El Príncipe de Asturias ha sostenido en Roncesvalles que la "fraternidad y superación, ideas fuerza del Camino de Santiago", deben servir de impulso para "hacer de España una Nación siempre mejor".

El Príncipe de Asturias y de Viana ha sostenido en Roncesvalles en la apertura del Año Jacobeo que la "fraternidad y superación, ideas fuerza del Camino de Santiago", deben servir de impulso para "hacer de España una Nación siempre mejor".


"Una España orgullosa de su riqueza cultural tan diversa y plural a la que las legítimas diferencias sirvan de acicate para lograr un país más cohesionado, una España más preparada y con energías renovadas, para reemprender con vigor la senda del crecimiento y del mayor bienestar", ha añadido el Príncipe, quien se ha mostrado emocionado por regresar a Roncesvalles y presidir de nuevo este acto como hizo en 1993 y 2004.


Además, don Felipe ha recordado su primera experiencia jacobea a los 8 años y cuando caminó como peregrino y se ganó el jubileo en el 93 y 97 junto a las órdenes militares de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa.


Don Felipe, que definió el Camino de Santiago como "un tapiz de principios que nos ofrece la oportunidad de tomar el pulso a la vida y al espíritu", afirmó que la ruta jacobea "nos evoca concordia, solidaridad y unión, al mismo tiempo que nos invita a superarnos, a mirar más allá y a perseguir altas metas". "Sabemos que el Camino no es sólo una senda que se recorre, sino que representa nuestras más profundas aspiraciones y proyectos", agregó.


Recordando unas palabras pronunciadas recientemente por el Rey, ha dicho: "Somos una gran Nación europea de larga historia y patrimonio inmenso, que no puede comprenderse sin esa diversidad que no solo nos enriquece, sino que sobre todo es consustancial al mismo ser de nuestro país".


"El Camino es y ha sido de modo esencial ruta de Europa y vía de universalidad", ha señalado, para, tras subrayar que fue "el primer proyecto europeo común", afirmar: "Hoy los europeos nos encontramos de nuevo juntos en un ambicioso e imprescindible proyecto común".


Don Felipe ha apuntado que este año, en el que se cumplen 25 años de la incorporación de España a "dicha obra de integración" y este país asume la presidencia rotatoria de la UE, quizás sea un "buen momento para insistir en la idea de que los altos ideales y valores que inspiran el Camino sigan orientando la maquinaria de esta gran obra humana que avanza inacabada".


"La universalidad es la última gran escala que aporta el Camino de Santiago y también por ello la UNESCO declaró a esta ruta Patrimonio de la Humanidad", ha sostenido don Felipe, quien ha tenido también palabras de recuerdo para quienes "sobrepasaron, con grandeza y valentía, la frontera del fin del mundo, implantando de ese modo la primera semilla de la globalización".


Así se explica, "junto a la esencial europeidad de España, su indudable y esencial dimensión iberoamericana", según el Príncipe, que ha subrayado que en América el nombre de Santiago "está profusamente presente" y evoca el espíritu de "solidaridad y superación que hace ya mil doscientos años comenzó a brotar entre la capital de Galicia y estos grandiosos montes Pirineos".


"Este Año Santo Compostelano, con realismo pero con ambición, debemos desearnos lo que más necesitamos. Unidos y con determinación, tengo la seguridad de que superaremos todos los retos que se nos planteen", ha concluido el Príncipe, que ha deseado un "feliz Jacobeo 2010".