AGUA

Boné no renuncia "a una sola hectárea" de regadío ni "a una gota de agua"

El consejero de Medio Ambiente del Gobierno aragonés, Alfredo Boné, ha asegurado que no está dispuesto a renunciar para Aragón, en el Plan Hidrológico de Cuenca en elaboración, a "una sola hectárea" de regadío ni a "una sola gota de agua".


Boné ha participado en la Exposición Internacional de Zaragoza en los actos del Día Nacional de Sudán y antes, en declaraciones a los medios, ha detallado sus dos premisas "irrenunciables" ante el borrador de Plan Hidrológico de Cuenca que ha presentado la Confederación Hidrográfica del Ebro y que está en información pública.


Se trata de que el documento garantice la reserva hidráulica de 6.550 hectómetros cúbicos que el Estatuto de Autonomía de Aragón establece para las necesidades de los aragoneses, y que el texto incorpore todos y cada uno de las 110 puntos incluidos en las Bases de la Política del Agua aprobadas definitivamente por las Cortes de Aragón en diciembre de 2006.


Para el consejero, la iniciativa del organismo de cuenca de hacer público el documento en esta fase inicial de su elaboración es "buena", pero como secretario general del Partido Aragonés ha mostrado su preocupación por el proceso de elaboración del texto.


Ha vaticinado "riesgos" de que surja un "debate difícil" acerca de garantizar que se incluya en la redacción final lo que ya establecen las leyes, como la de Regadíos o el propio Estatuto de Autonomía.

Por su parte, ha recalcado, no piensa renunciar ni a una hectárea de los regadíos establecidos en el Plan Nacional para Aragón ni a una sola gota de agua, es decir, a nada de lo ya pactado y conseguido.


Boné también se ha referido al anuncio realizado ayer por el presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, de que va a impulsar la obra pública, especialmente el Plan de Depuración, como una forma de impulsar la actividad económica en un momento de crisis.


Boné ha asegurado que la decisión de impulsar este plan, y otros del Departamento de Medio Ambiente como el de Gestión de Residuos o el de Establecimiento de Cortafuegos, es muy positiva, y su consejería está en disposición de acometer los proyectos y de contribuir "de forma eficaz" en esta creación de puestos de trabajo en el territorio.


En la actualidad, ha detallado, se ha ejecutado un tercio del Plan de Depuración, que se puso en marcha con el objetivo de cumplir con la Directiva Marco Europea que fija el año 2015 como el límite para depurar todas las aguas residuales.


El Plan prevé una inversión de mil millones de euros hasta 2015 para garantizar, con 132 depuradoras, unos ríos limpios. Ya están en marcha las que dan servicio a las poblaciones de más de mil habitantes equivalentes, mientras que las que atenderán a municipios de menos de mil habitantes equivalentes (unos trescientos censados) se acometerán en dos fases.


Las primeras serán las depuradoras de las cabeceras de los ríos pirenaicos, proyecto de interés general que beneficiará a 294 núcleos.

Boné ha negado, por otra parte, que el acuerdo con el Ayuntamiento de Zaragoza para que éste se incorpore de forma efectiva al canon de saneamiento en 2013 esté atascado y ha recordado que el acuerdo firmado por el Gobierno de Aragón y el Consistorio establece la plena incorporación de Zaragoza en esa fecha, por lo que "no hay premura".