El ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, ha asegurado que la construcción del Corredor Mediterráneo depende más de que el Gobierno de España mantenga el actual ritmo de inversión en esta infraestructuras que de su inclusión en el listado de proyectos que conformen la Red básica Transeuropea.

Blanco ha explicado que en caso de que esta línea pase a formar parte de esta red, la cofinanciación de la Unión Europea (UE) para su construcción no superará, "en el mejor de los casos", el diez por ciento del total del proyecto.

"La prioridad de los proyectos no la determina que estén o no en la Red Transeuropea. Su ejecución y desarrollo la marca el Gobierno de España año a año en los Presupuestos", ha declarado Blanco durante su intervención en el pleno de control al Gobierno del Congreso.

En este sentido, ha asegurado que "si se mantiene el ritmo de inversión" realizado en el Corredor Mediterráneo en los últimos años, la línea enlazará con la frontera francesa (con la conexión transfronteriza entre Figueres y Perpignan) en 2012 y con Murcia en 2014.

"Pero para ello es necesario mantener el actual ritmo de inversión. La planificación que hemos realizado responde a un nivel de inversión pública", ha insistido.

En este sentido, Blanco ha detallado que el Corredor Mediterráneo ha sido el que ha copado el mayor monto inversor este año, que cifró en 1.700 millones de euros, con lo que, según aseguró, en los ocho años de Gobierno socialista la inversión total ejecutada en esta línea asciende a 8.100 millones de euros. "Tengo dudas de si en los próximos años se podrá mantener esta inversión", apuntó.Irrenunciable

Pese a todo, el ministro ha ratificado que el Gobierno considera "irrenunciable" que esta línea "en su totalidad, desde Algeciras (Cádiz) hasta la frontera francesa", figure en el listado de la Red Básica Transeuropeas para el periodo 2012-2030 que la Comisión Europea anunciará el próximo 19 de octubre.

Ante la proximidad de la fecha, Blanco ha solicitado "extremar la moderación del debate" público. "El gallinero es malo", ha apuntado el ministro. "Es necesario que de una vez por todas defendamos el interés de España en la negociación y en la apuesta ante la UE por una red mallada de infraestructuras que garantice la competitividad y el desarrollo de nuestra economía", ha argumentado Blanco.

"Tenemos que tener una visión de España y no generar dudas sobre un proceso que va bien", ha añadido, para después recordar que, de igual forma, el Ejecutivo defiende que también formen parte de la Red UE otros corredores como el Atlántico, que une la frontera francesa con Portugal a través del País Vasco y Castilla y León, y el Cantábrico-Mediterráneo a través de Zaragoza.