accidente aéreo

“El piloto del F-18 tardó mucho en saltar, quería evitar caer fuera de la Base. Fue heroico”

Las primeras investigaciones de la caída del cazabombardero apuntan a que el siniestro puede deberse una causa 'material' derivada del uso del avión.

Imágenes del accidente de un F18 en la Base Aérea de Zaragoza.
Imágenes del accidente de un F18 en la Base Aérea de Zaragoza.
Guillermo Mestre

Las primeras investigaciones sobre la caída del cazabombardero F-18 el pasado sábado 20 de mayo en la Base de Zaragoza durante la exhibición que se realizaba para las familias de los militares del Ala 15 apuntan a que el piloto Daniel Pérez Carmona hizo una eyección para salir del avión cuando estaba “muy cerca del suelo”. Esto suponía poner en riesgo su vida y esta actuación se interpreta como la mejor manera de “evitar” que la aeronave cayera fuera de las instalaciones militares.

Los integrantes de la Comisión para la Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM), una institución creada en 1994, pasaron una semana en la Base Aérea de Zaragoza para realizar mediciones y pudieron tomar declaraciones a algunos testigos.

Aunque al piloto no han podido interrogarle todavía porque ha permanecido en la UCI durante una semana. Ahora se mantiene en la planta tras haber sido trasladado la semana pasada.

Se observa cómo el piloto baja en paracaídas a la vez que sube la nube de fuego formada por la explosión del avión militar.

Aun así, los investigadores están muy implicados en poder recuperar todos los vídeos y fotografías grabadas esa mañana al mediodía que ayuden a interpretar el suceso. De hecho, HERALDO ha mantenido contacto con varios de los civiles que pudieron grabar ese vuelo y  trasladaron esas imágenes a este periódico para publicarlas. Algunos de ellos han facilitado que esas grabaciones pueden utilizarse en el informe oficial sobre la caída del caza, dado que pueden ayudar a  explicar las condiciones en que se produjo el salto del piloto.

Fuentes militares conocedores de la investigación inicial relataron que “el piloto saltó in extremis” y lo hizo en unas condiciones muy complicadas para su seguridad. “Tardó muchó en el salto de la eyección y eso fue heroico porque el objetivo era que el aparato cayera dentro de la Base. Tuvo un mérito tremendo porque en el momento en el que saltó había unos 700 familiares que estaban asistiendo a la exhibición”, relataron.

La Secretaría General Técnica del CITAAM ha solicitado varias grabaciones singulares, más allá de la visión común que pudieron grabar los familiares desde un punto similar. De hecho, necesitan recoger “su versión más frontal” en la que se aprecie “la eyección del piloto segundos antes del impacto del avión contra el suelo”.

Un lector de Heraldo grabó en las proximidades de la Base Aérea de Zaragoza el accidente del F-18, por lo que se puede apreciar al piloto cayendo en paracaídas y cómo se estrella el avión militar.

CITAAM es el organismo oficial de carácter nacional encargado de investigar accidentes de aeronaves militares en territorio español. Fue creada en 1994 y es el equivalente militar de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC).

El vuelo del caza formaba parte de una demostración y tan solo una semana antes el mismo piloto se grabó explicando en qué consistía la exhibición y las maniobras que iba a llevar a cabo.

Una semana en la Base 

Varios oficiales de esta organización permanecieron una semana en la instalación militar aragonesa para poder acceder a los lugares donde se produjo el accidente y medir todos los registros necesarios para el informe oficial que realizarán sobre el suceso.

Han ido recogiendo varios vídeos grabados esa mañana y los califican de “magníficos” por la calidad que ofrecen. Aun así, los investigadores tienen que demostrar que son “auténticos” y “no se ha modificado”.

Se trata de realizar un informe con el reportaje gráfico o fotogrametría. Este estudio se facilita también al Juzgado Togado Militar de Zaragoza, que abre su proceso judicial sobre el accidente aéreo hasta que se determinan las causas.

Si el motivo es accidental o material por el uso del cazabombarero se archivará como apuntan las primeras investigaciones de este caso. Aun así, agregan que concluir el informe puede dilatarse en el tiempo porque en el caso de los F-18, un caza de fabricación de Estados Unidos, el examen del motor tengan que remitirlo hasta su empresa.

Aun así, el informe del CITAAM es hermético por el grado de confidencialidad que acumula y deben estar constatados todos los datos que se utilicen cuando se publique oficialmente.

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