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Sin Barreras 30 Aniversario 2024

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Palomas mensajeras, destino ‘Las Casitas’

Representantes del club de lectura Hijos de Ároman y de la Fundación CAI han visitado ‘Las Casitas’ y han conocido de primera mano la iniciativa que las Hijas de la Caridad gestionan y coordinan en pro de las personas sin hogar.

Imagen de “Las Casitas”, un espacio óptimo y cercano para la convalecencia y recuperación de las personas acompañadas.
Imagen de “Las Casitas”, un espacio óptimo y cercano para la convalecencia y recuperación de las personas acompañadas.
H.A.

Hace dos años, jóvenes del club de lectura Hijos de Ároman, organizado por Fundación CAI, decidieron donar todos los beneficios obtenidos por la venta de su primera obra al proyecto social ‘Las Casitas’, servicio que dinamizan las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl de Zaragoza, una iniciativa para que las personas sin hogar, convalecientes tras una enfermedad, operación o tratamiento puedan recuperarse en un entorno tranquilo y acogedor.

Representantes del club y de la Fundación CAI pudieron visitar en persona ‘Las Casitas’ y conocer de primera mano la iniciativa que las Hijas de la Caridad gestionan y coordinan en pro de las personas sin hogar. Sin duda, una experiencia enriquecedora para todos los participantes, donde se fraguó un vínculo invisible, pero firme, entre los dos colectivos. Al poco tiempo, se propuso a los jóvenes del club escribir cartas entre ellos mediante el proyecto ‘Palomas mensajeras’. Todos los miembros quisieron participar en el intercambio de cartas, misivas cargadas de entusiasmo, juventud y alegría.

Una dosis de alegría

Tras un año de intercambio, según las Hijas de la Caridad, cada reparto de cartas significa una dosis de alegría. Los residentes esperan los sobres con entusiasmo durante su convalecencia. La actividad estimula cognitivamente a las personas acompañadas, ayudándoles a expresar sus emociones y preocupaciones, además de paliar el sentimiento de soledad que sufren algunas personas, al carecer de una red familiar.

A través del intercambio de misivas se han creado vínculos afectivos sólidos entre las personas acompañadas en período de recuperación y los jóvenes del Club de lectura Hijos de Ároman.

Tras la experiencia tan positiva que ha supuesto, las Hijas de la Caridad no descartan trasladar este servicio a otros centros de la Obra Social San Vicente de Paúl.

Según los colombófilos, las palomas mensajeras son adiestradas para llevar pequeños objetos desde y hacia lugares no muy lejanos, a cambio, reciben una recompensa o un gesto de cariño al llegar a su lugar de destino. Ese gesto de amistad entre los protagonistas es el valor añadido de esta iniciativa, una relación emocional y afectiva en la que intervienen los chavales del Club Hijos de Ároman, las personas acompañadas de ‘Las Casitas’, las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl y Fundación CAI.

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