El incendio sigue en fase de estabilización, aunque se espera una jornada complicada

El incendio que afecta a Olba y San Agustín, originado en la localidad castellonense de Villanueva de Viver, evoluciona favorablemente en el frente turolense, aunque preocupa el viento de componente sur que se espera para la jornada de este sábado porque puede reactivar el flanco izquierdo, que es el que afecta a territorio aragonés. Sobre el terreno trabajan este sábado por la mañana 180 operarios, que están abriendo una pista con un bulldozer en la zona del Barranco del Lobo. 

El director general de Medio Natural y Gestión Forestal del Gobierno de Aragón, Diego Bayona, ha explicado que se ha trabajado "intensamente" durante la noche, aunque hay varias zonas a las que no es posible acceder por lo escarpado del terreno y todavía permanecen con cierta actividad.

Asimismo, ha indicado que esta dificultad se suma a la componente del viento, que también se espera que sea muy cambiante durante el día. "Estaremos muy alerta, porque puede ser una jornada complicada", ha añadido. Por el momento, la zona más comprometida en el sector aragonés es el barranco del Lobo.

INFOAR

En las horas centrales del día se focalizarán todos los medios de extinción en la parte en la que es posible que haya reactivación, a modo de prevención, ha precisado el director general. Según los datos de la noche de este viernes, ha ardido una superficie de unas 840 hectáreas, compuestas por pinar, monte bajo y parcelas agrícolas.

Con respecto a la dotación de medios, esta mañana trabajan sobre el terreno tres cuadrillas helitransportadas del INFOAR, cinco cuadrillas terrestres, siete autobombas, 12 APN y un puesto de mando avanzado (PMA) con cinco técnicos, además de la colaboración de las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) de Daroca y Cuenca, así como dos dotaciones de bomberos con dos nodrizas de la Diputación Provincial de Teruel.

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) trabaja en la extinción con dos Brigadas de Labores Preventivas (BLP) y un bulldozer.

Por otra parte, Bayona ha señalado que ya se ha contactado con otras comunidades autónomas, como Castilla-La Mancha, y es previsible que se incorpore a las labores de extinción del incendio para colaborar y participar. No obstante, ha manifestado que estos medios es posible que se incorporen en el flanco de la provincia de Castellón.

En la tarde de este jueves se inició el incendio en Villanueva de Viver, donde afecta ya a 4.000 hectáreas, y es zona limítrofe de Castellón y Teruel. El fuego, con un perímetro de 40 kilómetros, ha devorado ya 4.000 hectáreas de bosque entre Aragón y Valencia (840 en Teruel) y ha obligado a desalojar a 1.500 personas de ocho núcleos de población, de las que 250 pertenecen a las localidades turolenses de Olba y San Agustín.

La evolución del incendio es más favorable en el frente turolense y el fuego se encontraba este viernes en fase de estabilización.  Las cuadrillas terrestres trabajan sin descanso abriendo cortafuegos y caminos en el entorno de Olba para frenar el avance del incendio en caso de que se cumplan los peores pronósticos.

El director de Medio Natural y Gestión Forestal del Gobierno de Aragón, Diego Bayona, que compareció horas antes desde el mismo dispositivo, mostró su apoyo a la población desalojada y calificó el incendio de "muy virulento". Pese a la menor afección en la provincia de Teruel, advirtió de que el fuego "sigue activo" y podrían reproducirse las llamas en dirección a Olba y San Agustín.

Fotos: incendio en Teruel, donde 250 vecinos han sido desalojados

Las complicadas condiciones del incendio impidieron a los evacuados regresar a sus casas y no es seguro que puedan hacerlo este sábado. "Es mejor ser prudentes", remarcó Bayona, quien no ocultó su preocupación porque, apenas entrada la primavera, Aragón haya registrado ya un gran fuego forestal. "Estamos viendo los efectos del cambio climático", destacó.

En el frente de Castellón

Los trabajos desarrollados durante la noche por los medios de extinción han permitido que el perímetro del fuego del incendio forestal  no haya avanzado, según informa Emergencias de la Generalitat.

Durante esta noche la meteorología se alió en la lucha contra las llamas en cuanto a humedad del terreno y ausencia de viento, ha destacado el secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, José María Ángel, en un balance de las tareas realizado a primera hora de este sábado.

Según ha informado, los trabajos han dado resultados óptimos en "las dos misiones" marcadas anoche: frenar el avance del perímetro de las llamas y que estas no alcanzaran la carretera CV-195 entre Montán y Montanejos.