Zaragoza no sabrá si es sede del Mundial 2030 hasta después de las elecciones

Las ciudades que optan a convertirse en sedes del Mundial de fútbol de 2030 en caso de que España y Portugal sean los organizadores conocerán los requisitos definitivos a cumplir el próximo mes de junio, fecha elegida por la FIFA para su aprobación. A partir de entonces, las candidatas, entre ellas Zaragoza, presentarán su proyecto oficial, y la Federación Española (RFEF) tomará una decisión, previsiblemente, en el mes de septiembre. De los 15 aspirantes deberán quedar solo 11.

La principal consecuencia de este retraso -inicialmente se había previsto conocer las bases en marzo- es que las elecciones autonómicas y municipales del próximo mes de mayo salen de la ecuación. Y en proyectos como el de Zaragoza, donde las principales instituciones implicadas son de distintos color político, puede suponer un balón de oxígeno para la candidatura, una vez apartadas las tácticas electorales.

Estos y otros detalles se han abordado este martes en la sede de la RFEF en Las Rozas (Madrid), donde los responsables de la candidatura ibérica, que iría de la mano con Ucrania, han explicado a las 15 aspirantes a ser sede el nuevo calendario y los pasos a dar a partir de ahora. “Nos han pedido que pasemos de las intenciones a los proyectos”, ha explicado tras la reunión Víctor Serrano, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza.

Según han detallado fuentes de la Federación, las 15 aspirantes han estado hasta ahora preparando sus propuestas de acuerdo a los requisitos exigidos para el Mundial de 2026, de forma que cuando se conozcan los de 2030 las candidaturas tengan buena parte del trabajo hecho. No se esperan grandes cambios -por ejemplo, en el aforo mínimo de los estadios-, pero sí alguna variación. De hecho, en la sede de Las Rozas no se descarta que cuando se conozcan los criterios definitivos alguno de los proyectos se vea apeado directamente del proceso.

Por este motivo, la Federación no visitará las posibles sedes hasta el verano. A partir de junio se valorarán los proyectos y se confía en tener hecha la criba en septiembre. Una vez elegidas las 11 sedes españolas (Portugal tendría 3 y Ucrania 1), se trabajará en el dossier de la candidatura ibérica, que se deberá presentar en abril de 2024. Ese año, en septiembre, está previsto que la FIFA celebre un congreso en el que anuncie quién es el organizador de la cita mundialista.

Los avales, fundamentales

La reunión ha estado encabezada por Andreu Camps y Jorge Mowinckel, secretario general y director de Estrategia y Relaciones Internacionales de la RFEF respectivamente, mientras que la parte portuguesa del proyecto ha estado representada por Antonio Laranjo. Los tres han trasladado a los aspirantes la necesidad de apretar el acelerador para llegar a tiempo y, sobre todo, de contar con toda la documentación preparada.

En especial, a la RFEF, y en último término a la FIFA, les preocupa que los proyectos estén bien asegurados mediante los correspondientes avales, “tanto económicos, como políticos”, y no solo con “simples declaraciones de interés”, han señalado fuentes de la Federación tras el encuentro. En este sentido, en Las Rozas temen que las discrepancias entre administraciones en aquellas candidaturas más “verdes” puedan hacer caer algún proyecto.

En muchas de las ciudades aspirantes es necesario reformar o directamente construir un nuevo estadio, como Valencia, Gijón o Gran Canaria, y cada una tiene sus particularidades. En este sentido, Zaragoza, como quinta capital del país, tiene el respaldo de la Federación, pero debe atar todos los cabos sueltos. Los principales son el nuevo campo de fútbol y la futura ciudad del deporte, que preste servicios complementarios a las selecciones allí destinadas.

“Estamos trabajando en el proyecto del nuevo campo, vamos a estar a tiempo, si de aquí a un mes se nos pide un proyecto lo tendrán”, ha defendido Serrano como interlocutor de la candidatura zaragozana, que también ha estado representada por el director general del Real Zaragoza, Raúl Sanllehí, el presidente de la Federación Aragonesa de Fútbol, Óscar Flé, y Miguel Ángel Marín, jefe de servicio de Actividad Deportiva y Competición de la DGA.

“Nos han pedido que las ubicaciones tengan todos los parámetros legales desde el punto de vista urbanístico, que es en lo que estamos ahora en Zaragoza. El día 27 termina el plazo de alegaciones iniciales al PGOU que permitirá iniciar el proyecto”, ha detallado el edil de Cs. Según sus cálculos, “en abril o mayo” se lanzarán los pliegos de condiciones para la concesión del nuevo estadio, mientras que las obras de construcción empezarían “antes de acabar 2023”.

Respecto a la futura ciudad del deporte, una infraestructura exigida por FIFA, los plazos de construcción apremian menos, pero sí se debe definir su proyecto. En este sentido, el emplazamiento favorito es el Parking Norte de la Expo, de titularidad autonómica. De nuevo, trasladar la decisión más allá de las elecciones podría desbloquear su puesta en marcha.

“Nosotros no trabajamos con el calendario electoral, sino con el del Mundial”, ha querido aclarar Serrano, que no obstante ha reconocido que la RFEF les ha pedido “trabajar de forma conjunta”. “Estamos una serie de administraciones involucradas de distinto color político, pero debemos estar unidos en torno a la fortaleza de la candidatura”, ha reivindicado.