congreso de autismo
Reclaman nuevos modelos para lograr mayores tasas de empleo entre personas con autismo
Alrededor de un 70% de los que padecen este síndrome no tienen un trabajo. La ministra de Educación, Pilar Alegría, recuerda en Zaragoza la apuesta por la adaptación curricular y la Formación Profesional.
Elevar la tasa de empleabilidad entre las personas con autismo en uno de los retos que se están abordando este viernes en el I Congreso nacional sobre Calidad de Vida e Inclusión en TEA, organizado por Atades y que se ha celebrado este viernes en Zaragoza. "Hay que avanzar en nuevos modelos que llevan a tasas de empleo mayores", ha apuntado Paula Rodríguez, responsable de a·Autismo, quien ha recordado que alrededor de un 70% están en el paro.
En este sentido, la ministra de Educación, la aragonesa Pilar Alegría, ha incidido en el "esfuerzo importante" que realiza el Estado para lograr la integración de las personas con necesidades especiales, con 60.000 alumnos escolarizados, el 83% de ellos en centros ordinarios. Asimismo ha señalado que en la nueva ley educativa, la Lomloe, se están llevando a cabo "adaptaciones curriculares y en la evaluación" con el objetivo de que "no les impida promocionar en cualquier ciclo y etapa".
También ha señalado los "avances" que se están dando desde la Formación Profesional (FP) para reservar plazas para conseguir esa integración laboral. "La mayoría de estos grados, cuando se acaban, dan un gran nivel de empleabilidad, también a los estudiantes con algún tipo de necesidad educativa o discapacidad", ha apuntado.
Y, por ello, ha incidido en la necesidad de contar con "mayores recursos y medios". Como ejemplo, ha señalado la ampliación de las becas, de las que se benefician en todo el país más de 240.000 alumnos con necesidades de apoyo educativo. Ha recordado los más de 4 millones de euros transferidos a Aragón para que el programa PROA+ se desarrollo en 104 centros educativos de la Comunidad y los algo más de 1,2 millones de euros de otro proyecto para impulsar la educación inclusiva de los 38 con los que está dotado en 2023. "Lo más importante -ha incidido la ministra- es la atención individualizada que se genera desde la Atención Temprana".
Aunque Rodríguez ha reconocido en que en los últimos años se han logrado avances en investigación que han permitido cambiar los modelos de intervención, el objetivo ahora es centrarse en la calidad de vida de quienes tienen esta condición del neurodesarrollo. Por ello, ha puesto el foco en la necesidad de anticipar aún más la detección temprana, dado que lo ideal es que ocurra "antes de los cuatro años".
Sin embargo, ha especificado, "hay casos que se diagnostican más tarde, especialmente, los de nivel 1". Y, además, ha señalado en la necesidad de avanzar en modelos que atiendan a la vejez. "Hemos trabajado mucho en infancia, pero nos queda por avanzar hacia las edades más tardías", ha reclamado.
