La digitalización de los libros de Registros Civiles de Aragón supera el 63 por ciento con 3 millones de inversión
Aragón fue la primera comunidad que, ya en 2022, tenía digitalizados todos los libros de los Registros Civiles de una provincia, Teruel.
La consejera de Presidencia del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez, ha visitado este jueves la Ciudad de la Justicia de Zaragoza, acompañada por el presidente del TSJA, Manuel Bellido. Ha destacado que ya se han digitalizado unos 9.000 libros de los Registros Civiles, entre el 63 y el 65 por ciento, con una inversión de tres millones de euros.
En declaraciones a los medios de comunicación, la consejera ha indicado que Aragón fue la primera comunidad que, ya en 2022, tenía digitalizados todos los libros de los Registros Civiles de una provincia, Teruel, "la primera en el conjunto del país", añadiendo que a mitad del próximo mes de mayo Aragón cumplirá "un nuevo hito" porque será la primera región con todos sus libros de Registros Civiles digitalizados. En breve se terminará de digitalizar la provincia de Zaragoza y el mes próximo comenzará la de Huesca.
En total serán 3.056 volúmenes los que estarán digitalizados en breve en la provincia de Zaragoza dentro de los seis partidos judiciales que faltaban: Tarazona, Zaragoza, Caspe, Ejea de los Caballeros, Daroca y la Almunia de Doña Godina, ya que el Partido Judicial de Calatayud se llevó a cabo en un primer proyecto en 2021. De estos volúmenes, 1.002 corresponden a nacimientos, 615 a matrimonios y 1439 a defunciones.
Asimismo, en lo correspondiente a Huesca, los trabajos llevarán a digitalizar los 2.084 volúmenes disponibles, que corresponden a 666 de nacimientos, 535 de matrimonios y 883 de defunciones en los cuatro partidos judiciales de la provincia que quedan por digitalizar: Barbastro, Boltaña, Fraga, Jaca y Monzón, puesto que el Partido Judicial de Huesca también se digitalizó en 2021. Esta labor culminará previsiblemente durante el mes de mayo.
Mayte Pérez ha elogiado "el magnífico trabajo que están desarrollando, riguroso, muy tecnológico, también muy manual, garantizando todos los pasos", porque el objetivo final es "que un ciudadano pueda ir a un municipio y pedir un certificado de nacimiento o de defunción y cualquier funcionario pueda tener acceso".
Fondos europeos
"Es un dinero muy bien invertido que redunda en la calidad del servicio, en este caso la Justicia, y sobre todo en esa facilidad que damos al ciudadano de poder acceder a estos documentos tan vitales".
Los 1,6 millones de esta última partida de digitalización de libros registrales en Aragón provienen de los fondos europeos del Mercanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) Next Generatión.
El Gobierno de Aragón ha logrado captar en total más de 12 millones de euros con proyectos sobre la interoperabilidad del sistema Avantius o la digitalización de los registros civiles.
Las comunidades autónomas solicitaron al Ministerio retrasar doce meses la ejecución del Proyecto 0, que vencía el pasado mes de junio, pero el Ejecutivo autonómico lo tiene ya ejecutado, lo que supone adelantarse un año al plazo límite.
En el caso de los Proyectos Prioritarios 1, con 4 millones de euros para Aragón, también los Gobiernos regionales solicitaron retrasar su ejecución de diciembre de 2023 a noviembre del 25, pero la Dirección General de Justicia ha decidido continuar con el primero de los plazos, con dos años de adelanto.
Ha recalcado que de esta forma no solo se digitalizan los libros, sino que "se preservan esos libros que los Ayuntamientos nos han cedido una semana para hacer el trabajo y, además de devolverlos para que formen parte del patrimonio y la historia de su municipio, lo que se hace es trasladarlo al sistema Infored y los nuevos asientos van a estar informatizados".
Ha comentado que ya no se inscriben los acontecimientos civiles en papel y que ya solo se hace un asiento por persona, no una hoja por acontecimiento, como se hacía.
La digitalización de estos libros comenzó en agosto de 2020, con dos proyectos piloto en los partidos judiciales de Huesca y Calatayud, ha dicho Pérez, quien ha apuntado que en Teruel se han digitalizado los nacimientos desde 1920 y las defunciones desde 1935 y en el resto de la comunidad los nacimientos desde 1950 y las defunciones desde 1935.
Pérez ha enmarcado este proceso en la modernización de la Administración de Justicia, afirmando: "Hemos hecho muchos esfuerzos en acercar el servicio, facilitarlo", comentando que jueces, fiscales y otro personal de Justicia en Aragón cuenta con 1.400 portátiles entregados por la Administración autonómica.
Con esta digitalización se consigue la relación digital de los ciudadanos con el Registro Civil, lo que facilita trámites y hace posibles los servicios electrónicos directos al ciudadano y favorece la cohesión territorial entre la Comunidad.
Por otro lado, se permite que los funcionarios de cualquier nivel de la Administración, con la habilitación que en cada caso corresponda, puedan atender cualquier servicio de Registro Civil de cualquier ciudadano y desde cualquier lugar, trabajando con la misma base documental centralizada, en tiempo real, con todos los mecanismos de seguridad y de calidad.
"La verdad es que se están haciendo las cosas muy bien, otras comunidades ya están pidiendo los pliegos, el protocolo y todo lo que se ha hecho y estamos dispuestos a enseñarlo porque, al final, no hay fórmulas mágicas".
En el grupo de cabeza
Manuel Bellido ha expresado que la Administración de Justicia en Aragón ha avanzado "muchísimo" con el expediente judicial electrónico: "Vamos en el grupo de cabeza" entre las comunidades.
Ha enfatizado que la digitalización "es un camino sin retorno y en el ámbito de la Justicia no puede ser de otra manera" porque "facilita el trabajo y supone un ahorro de costes, no solo en papel, sino en espacio", mejorando asimismo la seguridad.
El presidente del TSJA ha recordado que el Registro Civil "cumple una función importantísima para acreditar muchas cosas" y que hasta la fecha los ciudadanos se tenían que desplazar hasta el Registro para solicitar documentos y ahora tienen la posibilidad de pedirlos por Internet.
