La Cámara de Cuentas destaca que 12 de las 19 grandes depuradoras del Pirineo están por iniciar

Tras fiscalizar al Instituto Aragonés del Agua, señala que los aragoneses pagan el mayor canon de saneamiento y depuración.

Sede la Cámara de Cuentas de Aragón en Zaragoza.
Sede la Cámara de Cuentas de Aragón en Zaragoza.
Asier Alcorta

La Cámara de Cuentas de Aragón reveló este lunes que las obras de 12 de las 19 grandes depuradoras previstas en el Pirineo, las que tratarán las aguas en municipios con más de un millar de habitantes equivalentes, aún están por iniciar, por lo que concluye que resulta "improbable" que puedan estar en servicio antes del plazo previsto, fijado para finales de 2024.

Así lo asegura en su informe de fiscalización sobre la gestión del Instituto Aragonés del Agua (IAA) correspondiente a los ejercicios 2020 y 2021, en la que recuerda que el plazo improrrogable establecido para dentro de dos años para las plantas altoaragoneses de interés general, financiar por el Estado, no se podrá cumplir. Así, incide en que el plan en ejecución se limita a siete instalaciones que suman 31 de los 79 millones previstos para las de mayor capacidad de tratamiento.

Sobre las impulsadas por las entidades locales mediante subvenciones, indica que hay 73 adjudicadas y en obras que suman 22 millones, aunque no puede concretar las que restan, por otros tres millones, porque no hay datos a falta de "concretar los proyectos correspondientes".

No obstante, incide en que del análisis del estado actual de las obras, hasta 82 infraestructuras iniciadas suponen casi el 40% de la inversión prevista y presenta "una planificación realista".

Además, destaca que 382 núcleos de población depuraban adecuadamente sus aguas a finales de 2021, lo que supone el 90,5% de la carga contaminante de Aragón, de la que el 40% corresponde al municipio de Zaragoza, que gestiona el servicio a través de la Sociedad Municipal Ecociudad.

Para financiar los costes de construcción, explotación y conservación de las instalaciones de saneamiento y depuración, el Instituto del Agua ha recaudado el ICA hasta 2021 y el IMAR, a partir de enero 2022. Para hacer posible la facturación del impuesto, los ayuntamientos suministran al IAA los datos sobre consumo de agua, con base en la lectura de contadores.

Demora en los recibos

Al respecto, los auditores señalan que solo el 36 % del importe facturado corresponde a consumos de 2021, debido a la propia operativa del impuesto, que hace que el último periodo de consumo se traslade al año siguiente, y a los retrasos de algunos ayuntamientos a la hora de remitir la información. Esto provoca que el tributo de varios años se liquide a la vez, con el consiguiente incremento de la presión fiscal.

Solo la demanda de agua urbana está sujeta al impuesto y representa el 5,5 % de la demanda total, y el resto es, fundamentalmente, de uso agrario, que no está sujeta al impuesto.

En su informe, el órgano fiscalizador destaca que Aragón es la comunidad autónoma en la que más se paga por el servicio de saneamiento y depuración y ocupa la cuarta posición si se suman los conceptos de abastecimiento y saneamiento y depuración. En concreto, 1,54 € por metro cúbicos cuando la media autonómica es de 0,81 € por m³. Sin embargo, la tarifa media del abastecimiento en Aragón es más barata que la media (0,58 €/m³, frente a 0,97 €/m³). Para ello, se basa a su vez en los dos últimos informes de la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS).

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