El bar de Calatayud que ha repartido 22 millones de euros de la lotería con sabor a tortilla de patata

El Brindis ha vendido la mayor parte del cuarto premio, a lo que se suman otros 14 millones desde la administración del paseo Cortes de Aragón y que han ido a parar a la ciudad, la comarca y hasta a Cerler.

La alegría se ha desbordado este 22 de diciembre en el Bar Brindis de Calatayud
La alegría se ha desbordado este 22 de diciembre en el Bar Brindis de Calatayud
Macipe

Sofía y Manolo Sánchez, del bar Brindis de Calatayud, están acostumbrados a repartir desde detrás de la barra tapas, pinchos y una tortilla de patatas que quita el hipo a cualquiera. Lo llevan haciendo con normalidad y buen trato durante más de 20 años, muchas horas y todos los días. A lo que no están acostumbrados es a distribuir la friolera de 22 millones de euros entre sus familiares, amigos, clientes de toda la vida y vecinos del entorno de la ronda del Puente Seco, en el bilbilitano barrio de Consolación. Ambos se abonaron al número dos décadas atrás, comprándolo en la administración del paseo Cortes de Aragón, desde donde han salido otros 14 millones.

Los dos hermanos tomaron el relevo de sus padres, que abrieron el negocio en 1992, hace dos décadas, cuando decidieron pedir el 54289 para ser abonados. "Lo jugamos todas las semanas y nunca nos había tocado nada", relata Sofía, entre abrazos y lágrimas de emoción: "No he dejado de llorar". "Hace mucha ilusión. Estoy muy contenta", confiesa, detallando que de los 1.100 décimos muchos se han quedado en el barrio, pero también han salido hacia Santa María de Huerta, localidad soriana de donde es su madre.

"Estábamos repartiendo los almuerzos y nos hemos enterado por la tele. Ha sido inesperado", explicaba, recordando cuando poco antes de las 11.10 han cantado el premio en el Teatro Real de Madrid. Mientras, su hermano Manolo entraba y salía del local y mostraba una ristra de boletos con el mismo número, al mismo tiempo que no dejaban de entrar clientes exultantes con un cómplice "¡que nos ha tocado!". Cava, cerveza y chupitos han sustituido bruscamente, sin paños calientes, a los cafés de media mañana.

A las puertas del negocio se agolpaban bilbilitanos de todas las edades y de todos los puntos de la ciudad, pero con un hilo en común: la alegría y la felicidad correspondientes a los 20.000 euros por tique. "Estaba cortando en una máquina una tabla y cuando he oído el número sin saber el premio, la he tirado al suelo, me he echado a correr y ya nos hemos enterado de que era el cuarto. Podría haber sido mejor, pero no está nada mal", contaba Jesús Pinilla, de la carpintería que lleva el apellido familiar.

"Llevamos uno cada uno de la familia y ayer, en la administración, cogí otros tantos y sin darme cuenta había otro más del que ha tocado", indicaba, a la vez que valoraba que "ha tocado en una zona de trabajadores, donde habrá gente a la que le puede hacer falta y lo necesite". "Nunca había sentido esta sensación y es algo… Es preciosa", contaba en la calle Merche Melero, acompañada de su marido Fabián Martínez.

En su caso, detallaba que estaba "comprando y me ha llamado mi hijo Álvaro para decírmelo y es que estoy encantada, porque les ha tocado a todos los amigos, a mis hermanos". Al mismo tiempo, uno de ellos, José María, se abrazaba con ella y contaba que "me he enterado cuando volvía de Villarroya en la furgoneta, que me han empezado a decir que nos ha tocado y pensaba que era de cachondeo".

En conjunto lo celebraban Pilar Millán y Lucía Pérez, dos de las cuatro amigas que compartían un boleto: "Lo cogió una amiga que vive cerca y lo compartimos entre todas porque acaba en 89, el año de nuestro nacimiento. Y hace menos de un mes una del grupo ha tenido un hijo, así que con el pan debajo del brazo". También allí estaba Marta Bosch, que relataba con una sonrisa: "Estábamos tomando café y he dicho "imagínate que nos toca la lotería" y me ha contestado que ya sería gordo". "Nos vendrá bien", concluía.

Para Beatriz Lázaro e Iván Millán, la felicidad es doble: "Estoy de 31 semanas", apuntaba ella. "Estaba en el médico, me ha llamado él –señalando a su pareja- y yo colgándole. Hasta que me ha mandado un whatsapp y me ha puesto que se lo cogiera, por favor", confesaba Beatriz. "Me ha pillado en casa, he pegado un bote y a correr. Somos clientes de toda la vida", indicaba Iván.

La familia Carrau, felicidad habitual y no menos especial

El 54289 ha salido de la administración número 1, en el paseo Cortes de Aragón. Es la que gestiona la familia Carrau y es la misma que en enero de 2021 repartió 40 millones del gordo del sorteo del Niño. "Estamos muy contentos. Es un motivo de orgullo, porque hay que tener en cuenta todo lo que hemos repartido estos años y siendo una ciudad tan pequeña", reconocía emocionada María Carrau.

"Tenemos muchos abonados a este número, pero vamos, ayer a última hora vino un señor y se llevó uno", explicaba, puntualizando que está repartido por muchas zonas de la ciudad e incluso fuera de ella. "Siempre mandamos al bar Chiñella, de Cerler. Han sido 10 billetes (200 décimos), lo que son 4 millones de euros", valoraba.

Entre las agraciadas, están muchas clientas de la tienda Charol Boutique, que ha repartido 1,2 millones de euros en participaciones. "No había repartido más que una pedrea. Esto es una alegría. No me lo creo", detallaba Maribel Melero, que lo toma como un regalo anticipado, ya que en marzo cumple 40 años con el negocio.

"Pensaba hacer una fiesta, pero ahora lo tengo clarísimo", subrayaba. En su caso, las papeletas se han ido hasta Aniñón, Cubel, Ariza y, por supuesto, Calatayud. "Son clientas muy fieles y estoy muy feliz por ellas".

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