El Miguel Servet, con más de 400 emergencias al día, reprograma algunas operaciones del lunes

El Infantil confía en que las tres camas más de uci pediátrica sean suficientes para atender la demanda.

Sanitarios del sindicato CSIF se concentraron este viernes a las puertas del Departamento de Sanidad.
Sanitarios del sindicato CSIF se concentraron este viernes a las puertas del Departamento de Sanidad.
J. Miguel Marco

La elevada incidencia de los virus respiratorios lleva al límite los servicios de urgencias de prácticamente todos los hospitales de Aragón. La estampa, según denuncian los sindicatos, se repite casi al milímetro: salas de observación llenas, pacientes esperando una cama en planta y algunos incluso en los pasillos. Y, ante esta situación, el hospital de referencia, el Miguel Servet de Zaragoza, ya ha tenido que tomar las primeras decisiones de calado y ha reprogramado algunas de las operaciones previstas. De momento, la medida solo se llevará a cabo el lunes y no afectará a las intervenciones oncológicas, cardiacas y ni del Materno Infantil. Tampoco a aquellos pacientes que ya se encuentran ingresados.

Cada día, aseguran fuentes de este centro, solo en la General, se atienden a más de 400 personas en urgencias, por encima de la media habitual. Como resultado, este viernes había 54 pacientes pendientes de subir a planta al mediodía, según apuntaron desde CSIF. Por la tarde, señalaron desde CESM Aragón, las tres salas de observación estaban llenas y había 14 pacientes en saturación. Y a los problemas de espacio se suma la falta de facultativos, puesto que, según denuncia esta central, en estos momentos faltan 15, "siete por debajo de plantilla, otros cinco puestos sin cubrir y dos personas de baja".

El Servet, además, está registrando una mayor presión asistencial entre la población infantil, con más de 200 urgencias diarias. Y, con las seis camas de uci pediátricas al completo, se ha decidido habilitar un nuevo espacio para atender a los niños más graves. Se trata de una zona ya preparada durante la pandemia como uci y que tiene una disponibilidad de nueve camas. Un aumento que el gerente del sector II de Zaragoza, Luis Callén, confió en que sería suficiente para asumir la demanda que se está produciendo. No obstante, explicó que la uci pediátrica tradicional, con sus seis camas, se deja "perfectamente preparada" por si fuera necesario usarla.

Preocupa la situación dado que comunidades vecinas como Cataluña también se encuentran al límite en cuidados pediátricos. Y parece que Aragón todavía no habría pasado el pico. Durante la última semana, según los datos del Boletín Epidemiológico, la incidencia de infecciones respiratorias graves atendidas en los hospitales era de 26,4 casos por cada 100.000 habitantes, superior a la del año pasado que se situaba en los 22,2. Destaca el especial impacto en los menores de 4 años, donde se dispara a los 200,5 contagios por 100.000 habitantes.

La Comunidad también está registrando más diagnósticos de gripe que los habituales para estas fechas, con 246 atenciones en urgencias la última semana y 25 ingresos. Por su parte, la covid tiene un comportamiento bastante desigual. En estos momentos, la tendencia de positivos va a la baja, mientras que aumentan las hospitalizaciones hasta alcanzar los 111 ingresados, 17 más que una semana antes.

Esta presión no es exclusiva del Miguel Servet. El Hospital Clínico este viernes por la tarde solo tenía una cama libre en observación, mientras que las plantas estaban llenas, al igual que las salas de espera, según destacaron desde CESM Aragón. No obstante, fuentes del centro recalcaron que se está pudiendo "absorber" la presión actual y no está siendo necesario derivar pacientes a otros hospitales ni reprogramar operaciones. La situación se replica en el Royo Villanova, con la sala de observación llena ayer por la mañana y siete pacientes en el pasillo.

Las urgencias del Hospital Obispo Polanco también están "saturadas". Así lo afirmó uno de los médicos que trabaja en esta unidad, Jesús Martínez, quien explicó que el equipo sanitario atiende cada día a cien pacientes, una cifra muy superior a la del año pasado y a la de la época prepandémica. Muchos de los enfermos son niños afectados por la ola de procesos infecciosos respiratorios. Pese a contar con una plantilla muy ajustada, está llevando a cabo operaciones quirúrgicas a pleno rendimiento y no ha sido necesario derivar pacientes a Zaragoza. En Huesca, las urgencias también están al límite.

Apuesta por la humanización

Una treintena de asociaciones, pacientes y facultativos se reunieron ayer en el Auditorio de Zaragoza para participar en la primera jornada de humanización de sector II de Zaragoza. "Es un primer paso y es un ejemplo de que la Administración está por la labor de humanizar la atención", detalló Cristina Calles, trabajadora social de la Asociación Aragonesa para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (Alcer). Por su parte, Callén explicó que desde hace cinco años se trabaja para que los profesionales tengan siempre presente que la humanización es algo "irrenunciable" y que forma parte de la "asistencia ordinaria". De momento, este año se han llevado a cabo mejoras en las salas de espera de Oncología y Urgencias pediátricas, de Maternidad y de la General, entre otras.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión